Deseo informar por el gran desconocimiento del público en general sobre los detenidos y procesados por los problemas del partido Nacional – Newell´s.

Una nueva derrota. Y sin levante. A esta altura ni el más optimista puede creer, en el transcurso del partido, que este Nacional sea capaz de revertir un resultado adverso.

Sentada en la tribuna ajena de un estadio ajeno, quedan menos de seis minutos para terminar el partido y miro al piso de la grada de color ajeno y pienso que otra vez no se dará lo que quiero.

Desde hace unas semanas que estábamos esperando la confirmación oficial para poder adelantar la noticia. Se nos había pedido reserva pero ya se filtró en algunos medios.

Cada uno puede tener su interpretación acerca de los incidentes suscitados anoche entre policías e hinchas tricolores. De uno y otro lado pueden tener explicaciones, pero nada justifica el abuso.

Muchachos, echemos una mirada a la historia. Sí, ya sé que el fútbol cambió, pero el cometido del juego sigue siendo el mismo. Ganar, apelando a todo lo que sea posible dentro de la legalidad.

En un momento complicado e intenso como éste, son los dirigentes, cuerpo técnico y jugadores los que tienen que resolver como lograr salir adelante y retomar las victorias, ojalá lo antes posible.

Cerremos los ojos y tomemos todos los nombres del plantel de Nacional hoy e imaginemos la situación ficticia de decirle a un cuadro chico que se los vamos a prestar para jugar una temporada.

Hermanos tricolores: estamos pasando una mala racha, es cierto. Ya va un tiempito que no nos sale una. Pero por favor, con el corazón en la mano se los pido, no dejemos de ver las cosas positivas.

Una ilusión es solamente eso, una esperanza en algo que sabemos podrá no ser real pero puede darse.