Empate que no sirve

Nacional no pudo mantener la ventaja conseguida en el final, y empató un partido que lo deja lejos de la punta. 

Esperando. El equipo de Nacional ingresó con modificaciones de nombres respecto al partido ante Plaza Colonia. Ingresó Rómulo Otero en lugar de Mauricio Pereyra, y Lucas Morales y Gabriel Báez volvieron a la titularidad en los laterales. El esquema táctico varió en algo. Jeremía Recoba se volcó más al medio y jugó de volante por izquierda. Otero lo hizo tirado a la banda izquierda, y Nico a la derecha. Pero a los pocos minutos hubo una modificación obligada. Diego Herazo se lesionó y el Diente pasó como nueve e ingresó Lucas Villalba por la derecha.

El partido comenzó con el Tricolor abroquelado en su cancha tratando de no dejar espacios. Sabido es que Liverpool hace de la tenencia y movilidad del balón su estandarte de juego. Y si bien a los njueve minutos se logró un gol de contragolpe en una jugada personal de Recoba, se lo veía mejor al negriazul con el balón. A pesar del bloque defensivo bajo, encontraron espacios permanentemente, tanto por el medio como por los costados. No demoró mucho en venir el empate de Liverpool y así finalizó la primera mitad.

Abierto. La segunda mitad tuvo dos etapas diferentes. La primera parte con un Liverpool dominando el balón y el terreno de juego y donde el Decano no pudo nunca recuperar el esférico en zona media, Casi siempre terminaba la pelota en el área o en las manos de Mejía. Y es que Luciano Boggio es un jugador que se mueve mucho y sale a presionar arriba, pero deja espacios enormes atrás. Además se desordena y obliga a Oliva a cubrirlo lo que hace que queden mucha cancha libre.

La segunda parte fue algo más equilibrada, y fue a partir del ingreso de Yonatan Rodríguez. El Tricolor se adelantó y pudo robar alguna pelota más cerca del arco rival. Además, el ingreso de los juveniles Petit y Arady le dieorn dinámica y velocidad al ataque para salir de contragolpe. Así vino el segundo y parecía que Nacional podía quedarse con el triunfo. Pero un error defensivo hizo que el rival empatara y finalizara con el tanteador 2 a 2.

Lejos. El empate sirvió de poco. Seguimos lejos de la punta y se desperdició una linda oportunidad de descontarle al puntero. Esto es largo y si bien se pasó la mitad del Torneo, aún falta mucha agua por correr abajo del puente. Lo cierto es que hay que mejorar urgente porque jugando de esta manera es muy difícil pelear el torneo, y más  teniendo en cuenta que a la brevedad se viene la doble competencia. Ojalá se logre encontrar el rumbo rápidamente para jugar lo internacional y llegar a definir este Apertura.

Diego Ávalo