A quedarse con lo positivo y seguir mejorando

Nacional fue superado por el poderoso San Pablo en cifras de 73 a 98. La próxima ventana será en el mes de enero en Montevideo.

Todos sabíamos que era un partido muy difícil. Solo 24 horas de recuperación para enfrentar a un rival que llegaba fresco para su debut en esta ventana de la Basketball Champions League Américas.

Además, San Pablo es un muy buen equipo, plagado de figuras con importantes trayectorias. El equipo tricolor debe quedarse con lo positivo: el muy buen partido frente al local, Quimsa, la noción de que ese es el nivel de intensidad al que debe jugar y mantenerlo con continuidad; ya se ha demostrado que puede hacerlo, debe mantener ese ritmo para la disputa de la Liga Uruguaya. Si lo logra, el Bolso será uno de los firmes candidatos para disputar las últimas instancias de la misma.

También, estos viajes sirven para seguir formando y uniendo al grupo. Sumado a eso, la aparición de jugadores a los que la competencia a este nivel los puede transformar en opciones de rotación más potentes. Capítulo aparte para el desempeño del juvenil Patricio ‘Pato’ Prieto que ya es una opción consolidada para ingresar en la rotación del plantel. Tener muy buenos minutos a este nivel de élite no es poca cosa.

En fin, lo dicho: a quedarse con lo positivo que lo hubo y no es poco. En cuanto al partido en sí diremos que Nacional inició con su tradicional equipo abridor: Manuel Romero en la base, Santiago Moglia y Charles Hinkle en el perímetro, más Quincy Miller y Johndre Jefferson como ala pivot y pivot respectivamente. San Pablo comenzó con el base Coelho, Elio Corazza de alero, el norteamericano Tyrone Curnell de ala pivot, el alero experiente ex NBA Marquinho Sousa y el pivot Bruno Caboclo.

Al comienzo, Nacional defendió zona cuando convertía y hacia hombre al fallar. Su rival, como también lo hizo Quimsa, defendió todo el tiempo hombre. Cuando el tricolor defendía personal las parejas eran Romero con Corazza, Hinkle con Sousa, Miller con Bruno Caboclo, Jefferson con Curnell y Moglia con Henrique Coelho. Este cuarto sería el único que vería un trámite parejo entre paulistas y bolsos. Es que decididamente cuando el Tricolor tiene piernas y está enfocado es un equipo competitivo. Hinkle y Miller anotaron siete puntos cada uno para que el cuarto se cerrara en cifras de 22 para San Pablo y 19 para Nacional.

Seguramente la idea de Zylbersztein fue rotar en el segundo cuarto con jugadores que habían visto menos minutos en el partido anterior. A ellos se sumaba Miller. Una forma de tratar de mantener el ritmo de juego contra un rival que estaba empezando a «calentar motores». El tricolor ingresa con Lema, Jonathan Sacco, Miller, Prieto y Mauro Zubiaurre. También cambia la forma de defender pasando a la zona 2 – 3 con Prieto y Zubiaurre en primera línea y Sacco, Leonardo Lema y Miller atrás. Se intercambian goles y la diferencia se mantiene. Pero poco a poco Corazza comienza a convertir desde los 6.75 y a su vez, la defensa del equipo brasileño empieza a imponerse en rebotes y tapas. Los uruguayos incluso buscan variantes tácticas en ofensiva probando con un interno (Jefferson) y cuatro chicos: Pero nada revierte la sequía ofensiva de los dirigidos por Leo Zylbersztein. Pasan tres minutos sin anotar y San Pablo se va 41 a 26.

El Bolso rotaba permanentemente los jugadores en cancha y pasaba de defensa al hombre a la zona según la integración del equipo. En el paulista caen los triples de Cohelo, Corazza, Marquinhos. y el norteamericano Shamell Stallworth. Los rebotes y las tapas eran todas de Caboclo y Curnell. Fin de la primera mitad en cifras de 31 a 54. Nacional tiró solo dos libres en ese primer tiempo. Una muestra de cómo no fue necesario faulear para neutralizar su ofensiva. Por otro lado, el tricolor recibió siete tapas. Todo dicho.

Los goleadores del equipo uruguayo fueron Miller con diez y Hinkle con siete. En el tercer cuarto el Bolso saldría con el equipo titular con la variante de Lema por Moglia. Lo mismo haría el “visitante” (así lo estableció la planilla del juego) al cambiar solo a Coelho por Stallworth respecto a su equipo abridor. En esos primeros minutos Nacional vuelve a intentar cambiarlo la defensa según el resultado de su ofensiva inmediata anterior. Pero poco a poco se consolida una ventaja a favor del equipo brasileño que ronda los 20 puntos. La máxima diferencia llega a falta de dos minutos y medio con un resultado parcial de 49 a 75. Misma que se mantendría al final del cuarto: 78 a 51 a favor del equipo brasileño.

El último cuarto sólo sirvió para que ambos equipos profundizaran su rotación. Al final, Nacional achica diferencias para un resultado final de 98 para San Pablo y 73 para Nacional. Lo dicho: esta fue una ventana de BCLA con dos partidos que dejaron sensaciones diferentes. A quedarse con lo positivo y seguir mejorando. La próxima ventana será en el mes de enero en Montevideo, y se cerrará en San Pablo en el mes de marzo. Siempre frente a los mismos rivales.

¡Vamo’ el Bolso!