“No le podía dar más a Nacional como yo quería”

Luego de varios meses de silencio, Diego Polenta habló sobre su retiro, su relación con Nacional, su presente y los motivos que lo llevaron a dejar el fútbol profesional. 

“No le podía dar más a Nacional como yo quería”, comentó Polenta a “Minuto 1” de Carve Deportiva, al explicar su salida del club. “Fue una decisión 100% mía. No fue apurada, ya lo venía pensando hace mucho. Cuando uno ya no lo disfruta, es mejor dar un paso al costado”.

Aseguró que el retiro no fue traumático, como suele ser para muchos jugadores. “No extraño nada. Estoy tranquilo, en paz, disfrutando de otras cosas. A veces voy a Los Céspedes a tomar mate, a saludar. Es mi casa”, expresó.

Reconoció que el golpe final fue su expulsión ante Juventud por Copa AUF Uruguay. “Se me fue la pierna. Fue una manera de decir ‘acá estoy’, pero ya tenía la decisión tomada. Me fui al campo, lloré con el Seba Eguren y no volví más”.

Además, contó que su compromiso más fuerte era con Martín Lasarte y que sintió que le falló en algún momento. “Estaba ahí por Martín, no por Flavio Perchman”, reconoció.

Asimismo, admitió que su relación con Perchman, fue distante: “Ni bien ni mal. No tenemos relación. Como hincha, a veces me molesta que se hagan públicas ciertas cosas, pero se lo dije de frente”. También aseguró que entendió la decisión de que el capitán fuera Coates: “Es un líder positivo, tranquilo, de esos que trabajan en silencio”.

Por otro lado, habló de su amigo Nicolas López y su decisión de seguir en el club. “Estoy agradecido con el Diente como hincha, como amigo y como ex compañero. Tuvo todo para irse, a ganar el doble, y se quedó porque quiere ser campeón con Nacional”.

Destacó su compromiso y confesó haberle aconsejado que hablara más públicamente, más que nada cuando surgen determinadas interrogantes sobre su continuidad en el primer equipo tricolor. “Le dije que a veces es bueno salir a aclarar cosas, cortar con rumores. Pero él es así. Necesita cariño, afecto. Y eso, en Nacional, lo tiene”, confesó.

Desde que se retiró, Polenta no ha vuelto al Parque Central. Su vida está entre su familia, el campo y su nuevo desafío en Wanderers de Durazno, donde volvió a jugar en el marco de la Copa OFI. “Es una excusa para estar cerca del campo. Quiero disfrutar desde otro lado”, comentó y confirmó que volverá a jugar como zaguero y llevará la camiseta número 23.

También, aseguró que sigue de cerca la campaña del tricolor. “El trabajo de Pablo Peirano ha sido muy bueno. Nacional empezó muy bien, después se quedó un poco, pero es un equipo competitivo. Lo de la Copa ya sabíamos que iba a ser muy difícil. En el Uruguayo están haciendo las cosas bien”, detalló.

Sobre el joven Lucas Villalba, a quien conoce bien, dijo: “Tiene un potencial enorme. Es rapidísimo, sabe lo que tiene y toma decisiones inteligentes. Si mejora algunos detalles, no tiene techo”.

Por último, a casi un año del fallecimiento  de su amigo y compañero, Juan Izquierdo, Polenta comentó que sigue muy vinculado con su familia: “Hace unos días estuvieron en casa su pareja Celi, y sus hijos Juan Felipe y Lucero. Fue una tarde hermosa, me llena de paz compartir con ellos”.

Contó que está en contacto permanente y que también sus esposas se reúnen con frecuencia. Sobre la prometida ayuda de Conmebol, fue contundente: “Que yo sepa, no llegó nada. Ni siquiera un mensaje. A veces, un mensaje vale más que mil dólares”. 

Diego Polenta se despidió con la tranquilidad de quien lo dio todo. “Me fui en paz. Me voy con la tranquilidad de poder volver a Los Céspedes cuando yo quiera, de estar con la gente de Nacional, en mi casa, puedo levantar el teléfono y siempre tengo una respuesta”, concluyó.

Vanesa Baliero