Luces y sombras

En un partido que tuvo de todo, un jugador nuestro mal expulsado, y otra noche consagratoria del capitán Bergessio, Nacional igualó a cuatro ante Atlético Nacional.

El encuentro fue cambiante, sufrió diversos eventos constantemente, muchos goles, vaivenes en el resultado, un jugador mal expulsado, y otra noche consagratoria del capitán, Gonzalo Bergessio, Nacional empató 4 a 4 ante Atlético Nacional de Colombia. Un resultado que no era el esperado, que nos hará trabajar mucho para el futuro, pero que otorga diferentes lecturas por cómo se dio el partido.

Nacional puso un sistema de 3-4-1-2, que por momentos fue 3-5-2, sobre todo, cuando el rival se posicionaba en nuestro campo. El primer tiempo tuvo una altísima dinámica por parte de los dos equipos. Pasaron rápido de defensa a ataque, y utilizaron las diferentes virtudes que les permitieron conseguir sus chances. Pudimos tener la ventaja en la primera, pero un remate de Camilo Cándido de derecha dio en el palo.

Atlético Nacional, cuando saltó la presión, en dos o tres toques se puso de cara al gol. Así llegó el primero a los siete, con la defensa Tricolor mal parada y sin referencia, Jefferson Duque, que no tuvo marcas tras el centro que recibió, siguió la jugada y se la puso en la cabeza a Jarlan Barrera. Enseguida lo empató Nacional. A los 9’, desde un lateral, Mathías Laborda buscó a Leandro Fernández, desniveló y centró a Bergessio. El capitán puso el cuerpo notable para dejar al defensor fuera de la jugada y quedar mano a mano con el arquero. Gol 71 con la camiseta del Bolso para el cordobés.

La presión alta en la salida colombiana, fue un arma permanente del equipo de Alejandro Cappuccio. Así fue que pudimos pasar adelante cuando llegaba el cuarto de hora. Carballo corrió aparejado con el defensor y definió con lo justo. La sacaron en la línea y luego Leandro Fernández definió alto.

Los problemas grandes del equipo se notaron en defensa. Faltas de referencia, malas decisiones, y esto se tradujo en varias oportunidades de remates francos de la visita. Guillermo Centurión tuvo, por ejemplo, una tapada a boca de jarro cuando promediaba esa primera parte.

A nivel individual fue creciendo la figura de Brian Ocampo. Confiado, desnivelante en el mano a mano, y con decisiones inteligentes, puso, además, de cara al gol a Felipe Carballo, pero el volante demoró en la definición. El partido cambió sobre el final, donde hubo de todo. Guzmán Corujo fue expulsado por una agresión que no fue tal, y que el árbitro no vio. Es más, iba a amonestarlo, hasta que el juez de línea le sugirió la roja.

Para colmo de males, enseguida cayó el segundo de la visita. Atlético Nacional la movió de izquierda a derecha, y tras un buscapié despejado a medias, Andrés Andrade convirtió el segundo. Una vez más, y no es un dato menor, reaccionamos rápido. Leandro Fernández, tras doble pared con Cándido, la puso arriba, al ángulo para el 2-2 y conseguir su bautismo de gol con la camiseta del Bolso.

Alejandro Cappuccio arrancó la segunda parte con línea de 4 hombres, producto de la inclusión de Ángelo Gabrielli por Emiliano Martínez, amonestado. Nacional, lejos de amedrentarse, lo salió a buscar igual, y en el cuarto inicial de la segunda etapa tomó una ventaja importante, por obra y gracia de su goleador. Primero, Ocampo, una de las figuras del equipo otra vez, recuperó por derecha, jugó la pelota de derecha a izquierda, y Cándido puso una nueva asistencia, en la cabeza de Bergessio para el 3-2. Luego otra gran jugada de Ocampo, culminó en falta, y Fernández, fue el asistió al cordobés. Primer hat-trick a nivel internacional, el segundo desde que llegó al club, para completar 73 goles hasta el momento.

Con el partido controlado, y el equipo más replegado, pero sin chances concretas de contragolpe, el técnico hizo dos variantes, creemos con la idea de aportar piernas frescas para la presión, pero sacando a dos de las figuras cuando todavía faltaban 23 minutos. Bergessio y Fernández afuera, Guillermo May y Gonzalo Vega, adentro. Para colmo, Ocampo también salió lesionados minutos después, sustituido por Maximiliano Cantera, que al igual que May, debutó en el primer equipo.

At. Nacional fue a buscar, hizo ancha la cancha, la movió de banda a banda, es un equipo que toca muy bien, y que ayer su pecado fue defender muy mal, buscó superpoblar el área con jugadores corpulentos, y otros de buen pie. A falta de quince llegó el descuento, cuando a pesar de que defendíamos muy cerca de nuestro arco, no pasábamos zozobra. Un desentendimiento entre Centurión y Orihuela, terminó en gol en contra del zaguero. Y a falta de cinco, ya cuando el equipo no podía salir, no tenía aire para mantenerla fuera del área, estaba sitiado, una sucesión de toques derivó en el pie derecho de Jarlan Barrera, que, solo, en el centro del área, la puso contra el palo para el 4 a 4.

Los hinchas tricolores podemos darle varias lecturas al resultado final. Un buen punto por remontar y jugar 50 minutos con un hombre de menos, y mal expulsado, o el haber perdido dos, no solo por ser locales, sino por la ventaja que, a falta de quince, era de dos goles. El equipo se entregó, mostró cosas buenas, sigue en construcción, pero debe remontar y buscar puntos afuera. los resultados obtenidos, la historia, y la Libertadores, nos obligan.