Nacional recuperó los privilegios de locatario, salvo la Ámsterdam, y no cedió ante presiones patoteriles del jefe de la seguridad aurinegra.

Nacional, tal como había anunciado el presidente Eduardo Ache, tenía la decisión de, en este clásico, ir por la tribuna Ámsterdam y todo lo que esto conlleva.El vestuario de locatario y el banco detrás del línea, elementos considerados de importancia y de extrema justicia para el equipo que oficia como locatario.

Dos de tres

De antemano se sabía que no iba a ser tarea fácil. La respuesta de la Guardia Republicana ante la solicitud de la dirigencia tricolor fue que «aún no están dadas las condiciones para que Nacional ocupe la Ámsterdam. No podemos ofrecer las garantías necesarias». Ante este planteo, el club, en un nuevo acto de grandeza y en pro de la pacificación, aceptó no acceder a la tribuna que por derecho le correspondía, pero dejó bien en claro que se iban a usufructuar el vestuario y el banco de suplentes correspondiente al local.

Cambios en la marcha

En diálogo con Wison Miraballes, jefe de la Comisión de Seguridad tricolor, éste nos explicaba que «Nacional planteó quedarse con tres tribunas, la Colombes y las dos laterales, y dejar para Peñarol la totalidad de la Ámsterdam, con los pulmones correspondientes. Anteriormente, Eduardo (Ache) había intentado sin éxito tener una reunión con Jorge Vázquez. Finalmente lo llamaron ayer (lunes) con cierta urgencia desde el Ministerio del Interior, con la intención de que Nacional cambiara la decisión que había tomado en principio. A esta reunión concurrieron el presidente Eduardo Ache y el Prosecrtario, Dr. Pablo Durán, a quienes se les pidió un gesto de buena voluntad, teniendo en cuenta que no todos los partidarios del rival se sentían atraídos por la idea de compartir la tribuna con los integrantes de la «barra». Luego de esta reunión, nos citaron a directiva a mí y a Andrés Rodríguez, encargado de la seguridad del plantel, para verter nuestra opinión. De este modo, accedimos a compartir la tribuna América.»

Un buen comienzo

Miraballes reconoce que el no hacer uso de la tribuna Ámsterdam fue una medida de fuerza, tomada con la intención de obtener otros beneficios que Nacional considera impostergables. En opinión del jefe de seguridad fue un buen paso, ya que «por primera vez en años se escuchó a dirigentes de Peñarol decir que «entonces les hubiéramos dado la Ámsterdam». Peñarol siente que empieza a perder terreno».

Los cambios internos

En la reunión mantenida ayer con la policía, se acordó con el representante aurinegro, Jorge Barrera, que el ómnibus que trasladará a los jugadores de Nacional, arribará al estadio por el sector de la Colombes y los futbolistas se trasladarán internamente hasta el vestuario ubicado en la tribuna Ámsterdam. La delegación de Peñarol se manejará a la inversa, ingresando por la puerta de la Ámsterdam y haciendo el trayecto interno del estadio para ubicarse en el vestuario destinado al visitante.

Boquita con llave

Nos llamó la atención la intervención de Jorge Barrera en representación de la seguridad del equipo rival. Ante nuestro planteo, Miraballes aventuró que esto se podía deber a las declaraciones «totalmente fuera de lugar» del Insp. Retirado Washington Vega, quien habría declarado que la actitud tomada por Nacional, podría generar «problemas graves, e incluso ocasionar alguna muerte». En consideracioón de Wilson Miraballes, éste tipo de declaraciones «ya no va más. La política del miedo es parte del pasado» aseguró Miraballes. «Vega se vio superado por la posición de Nacional y la aceptación de la policía» continuó. «Vega creyó que se iba a seguir trabajando de la misma manera que antes, que Nacional continuaría cediendo la localía, etc. Cuando tomó conciencia de que nosotros habíamos logrado un acuerdo con la policía y que íbamos a ocupar el banco del local y destinar sólo la Ámsterdam para Peñarol, se vio cercado y empezó a decir todos los disparates que dijo. Afortunadamente, sus dichos fueron repudiados por Juan Pedro Damiani. Quiso meter presión y desde la cúpula aurinegra lo cortaron de raíz. Ahí está la explicación de la concurrencia de Barrera a la reunión de seguridad del lunes. Vega ni abrió la boca».

Lo que sí, lo que no

Wilson Miraballes dejó en claro que el hincha podrá concurrir al estadio con radios chicas, también serán permitidos termo y mate y en caso de lluvia se autorizará el porte de paraguas sin punta. En cuanto a banderas, se autorizarán las que no excedan la medida implementada como tope, de 2×1 mts. También se permitirá el acceso con banderas de mástil plástico. Consultado acerca del sistema de control de ingreso, Miraballes manifestó que «al haber preliminar, la intención es agilizar los controles, ampliando el horario de llegada al estadio. Cuanto más temprano concurra el público, mejor, dado que al haber cacheos se pueden ocasionar tumultos que enlentezcan el ingreso».

Asumiendo responsabilidades

Según nos explicó Miraballes, «Nacional va a proveer de seguridad en la zona de los palcos, en la tribuna América y, si bien aún no se ha coordinado a quien le corresponde la custodia del pulmón sobre la Olímpica, Nacional va a disponer de guardias para ese sector. Cabe destacar que no se venderán localidades para la platea América. Este sector será reservado para la prensa y los allegados a cada vestuario».

De parte de Nacional, una vez está dispuesto para tener una fiesta en paz, donde el que gane sea el fútbol. Esperemos que todos los actores estén a la altura de los acontecimientos

Ernesto Flores
decano.com

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