Hubo puntaje perfecto en lo de Abdón; siete en siete.
El fixture no era para nada fácil, en un campeonato sin revanchas nos había tocado salir a todas las canchas difíciles. Pero el Gran Parque Central es para los visitantes, la más difícil de todas las canchas. Y allí Nacional fue imbatible.
Tras un resultado injusto y adverso ante Danubio en Jardines, llegó un trabajoso triunfo ante Plaza Colonia en La Blanqueada.Era el primero de siete partidos en el Primer Estadio Mundialista que se cerrarían con un triunfo y vuelta olímpica en la última fecha ante Boston River.
A partir de Plaza, llegaron siete triunfos consecutivos que lo llevaron a la cima de la tabla de posiciones: ante Fénix (Centenario), Wanderers (Viera), Villa Española (Centenario), Rampla Juniors, Sud América, Racing y River Plate. Estos últimos cuatro, todos en el Gran Parque Central.
Llegarían después el empate ante Cerro en el Tróccoli, la derrota ante Defensor Sporting en el Franzini y el clásico no jugado por los graves hechos de violencia.
Quedaba el cierre, también en nuestra casa que culminó con triunfos ante Juventud de Las Piedras y Boston River.
El título estaba en casa y el legendario Gran Parque Central fue parte importante de un nuevo logro.
decano.com
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