Y se fueron al mazo.

Es de conocimiento público que los estatutos del Club Atlético Peñarol -fundado el 13 de diciembre de 1913-, fueron aprobados por el Poder Ejecutivo el 13 de abril de 1914.

En el artículo 1º de la mencionada disposición se establece el origen, fecha de fundación y alguna otra referencia como su residencia, etc.

El texto original de este artículo de 1914 no se ha mantenido tal cual en el paso del tiempo, pues sufrió modificaciones en las presidencias de Mantrana Garin y de Guelfi, ambas con la evidente intención de ir afirmando su versión sobre el origen y fundación del Club, sin presentación de la respectiva documentación que lo acredite, esto último al amparo de la negligencia de algún funcionario público.

Veamos entonces la redacción del citado artículo contenido en el estatuto aprobado en la asamblea de 1914.

“Artículo 1º.- Con domicilio en la ciudad de Montevideo con el nombre de “Club Atlético Peñarol” se designará en adelante al “Central Uruguay Railway Cricket Club”, fundado el 28 de setiembre de 1891.”

Iniciado el trámite en el Ministerio del Interior, organismo del Poder Ejecutivo, a cuyo cargo estaba la gestión del otorgamiento de la Personería Jurídica en aquélla época, el funcionario administrativo Oficial Mayor Pablo Varzi, estampo en el expediente un hecho de suma importancia no cumplido por los interesados: no se había incluido la documentación del CURCC.

Varzi demostró ser un funcionario atento, responsable y cumplidor de sus obligaciones, puesto que si se afirmaba que Peñarol era la continuidad del CURCC y aquello era un cambio de nombre, esto debió ser aprobado por una asamblea de socios de la Institución Británica, y la prueba de ello obligatoriamente debía estar redactado en el libro de actas.

Lo cierto es que a la observación de Varzi insólitamente nadie la tuvo en cuenta, ya por omisión o por quién sabe qué, el expediente siguió su trámite y fue aprobado bastándole a la administración solamente la versión de los hechos aportada por el gestionante y sin el soporte de documentación que la respalde, lo que significó un reconocimiento tácito.

El 27 de diciembre de 1958 la asamblea de socios de Peñarol modifica el texto del artículo 1º del estatuto, cambiando el relato de su origen, con precisiones.

El texto propuesto al Poder Ejecutivo del citado artículo en esta oportunidad decía así: “Artículo 1º – El Club A. Peñarol es una Asociación civil, fundada en Montevideo el 28 de setiembre de 1891 y tiene su domicilio y asiento legal en la ciudad del mismo nombre.- (Desde el 28 de setiembre de 1891 al 13 de abril de 1914 el Club A. Peñarol se denominó “Central Uruguay Railway Cricket Club·) (Peñarol)”.

Es destacable señalar que nuevamente la dirigencia aurinegra con la complicidad de la Administración Estatal, da una versión antojadiza y a su placer, hechos que lisa y llanamente son una falsedad.

Y en el caso me estoy refiriendo a que el Central Uruguay Railway Cricket Club (Peñarol), solo ha existido en la novela del decanato peñarolense, pues la propuesta de quiénes propulsaron el agregado a nombre del CURCC (Peñarol) fue rechazado por la asamblea del Club Británico realizada el 2 de junio de 1913 por 25 votos a 12.

En el correr del año 1957 bajo la presidencia del Cr. Guelfi se presenta en el Ministerio de Instrucción Pública y Previsión Social, una nueva modificación de varios artículos y una nueva versión del artículo 1º.

Su Texto era el siguiente:

“Artículo 1º- Con domicilio en la ciudad de Montevideo, y con nombre de Club Atlético “Peñarol” se designa desde el 13 de abril de 1914, al “Central Uruguay Railway Cricket Club” fundado el 28 de setiembre de 1891. (Fundación y cambio de nombre)”

Era esta la tercera versión sobre el origen y fundación del Club Atlético Peñarol que se presentaba ante la autoridad competente para su reconocimiento, sin la documentación que la respaldara seguramente motivados por los éxitos anteriores.

Pero el trámite del expediente en el Ministerio de Instrucción Pública en cuya carátula tenía estampado el Nº 5985/25, encontró un inconveniente, en el informe que al respecto realizó el Dr. Ricardo Clavijo , Asesor Letrado y Director General de Registros, quien en dictamen Nº 6817, Carpeta 6817/25, (papel numerado Bm 948789), y con fecha 21 de noviembre de 1958, realizó la siguiente advertencia sobre el trámite para dar vista a los gestionantes: “Los estatutos en vista merecen las siguientes consideraciones:

La referencia del art. 1º a la fecha de fundación de la entidad puede aceptarse sin perjuicio de las resultancias definitivas que arrojen las actuaciones que al respecto, y como es notorio, se han promovido.

Por consiguiente, la aprobación del texto presentado no implicará reconocimiento oficial alguno respecto de la antigüedad y orígenes del Club Atlético Peñarol”.

Esta intervención del Dr. Clavijo brindaba a los directivos aurinegros la gran oportunidad de laudar de una vez por todas a su favor la partida por el decanato, presentando ante las autoridades del ministerio Instrucción Pública la documentación que probara la fecha de su fundación y su origen.

Veamos a continuación el contenido del citado texto:

“No nos oponemos a que la referencia de la fecha de fundación se acerte con la salvedad de no implicar reconocimiento oficial alguno respecto a la antigüedad y orígenes del Club Atlético Peñarol. No obstante, a simple título informativo, cabe destacar que el actual Estatuto, debidamente aprobado, contiene ya también en su art. 1º igual referencia sin ninguna expresa salvedad.”

Como puede apreciarse ante la gran oportunidad de ganar la partida por el decanato, se fueron al mazo, lo que es la prueba evidente de que nunca han tenido la documentación que respalde su versión de que son la continuación del CURCC.

Nota: Se adjunta dictamen del Dr. Ricardo Clavijo y escrito firmado por el Cr. Guelfi y Esc. Carámbula.

Daniel Navascués Bonino

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