La flamante incorporación del Decano aterrizó en el país: hora de ver un poco de su trayectoria.
Eduardo Vargas ya está en el país de Nacional, y aunque conocemos de sobra sus credenciales con su seleccionado, ya es momento de profundizar aún más dentro de su carrera. A su llegada a Montevideo, definió su posición, luego de un inicio de carrera que lo vió nacer como puntero derecho, para luego terminar centralizándose en el campo: “En la Selección estoy jugando siempre de 9, y en el club en el que estaba a veces me colocaban de punta o segundo delantero. Me siento cómodo en las tres posiciones”.
Nacido el 20 de noviembre de 1989, Eduardo Vargas dió sus primeros pasos en el fútbol profesional jugando para el Cobreloa de su país, luego de pasos juveniles dentro del fútbol amateur y en las formativas de Universidad Católica y Palestino. Sin casi prácticamente pasar por las divisiones inferiores de los Naranjas, debutó profesionalmente en el año 2006, anotando su primer gol en 2008, contra Palestino por el Torneo Apertura de Chile.
Sus buenas prestaciones hasta el año 2009, donde terminó jugando 29 encuentros con Cobreloa anotando dos goles, le valieron su primer pase hacia uno de los equipos más grandes del país trasandino: la Universidad de Chile. En un pase que terminó siendo valuado por 1.4 millones de dólares, el atacante aterrizaría en la U, donde se transformaría en uno de los mejores y más codiciados delanteros del continente.
Tras un debut auspicioso por la primera fecha del Campeonato Nacional 2010, en un triunfo 5-1 contra Cobresal donde anotó el último gol de su equipo, se terminaría por volver pieza básica del recordado equipo de Jorge Sampaoli a lo largo del año 2011, donde volvería a jugar en su posición natural como puntero por derecha, abandonando la zona de volantes que había acostumbrado a las órdenes de Gerardo Pelusso en 2010.
Luego de finalizado el primer semestre, fue elegido como mejor futbolista del mismo por los capitanes de la Primera División de Chile, pero lo mejor estaría por venir. En una recordada campaña por Copa Sudamericana, la U de Chile se consagraría campeona del certamen continental, con Vargas anotando 11 tantos, incluyendo tres en las dos finales contra la Liga de Quito.
En un año soñado, con Torneo Apertura, Clausura y Copa Sudamericana debajo del brazo, y el galardón individual de ser mejor jugador y máximo artillero de la copa continental, Vargas alcanzó el estatus de segundo mejor jugador del continente en la elección del Rey de América, solamente por detrás de Neymar.
Fue finalmente incorporado por el Napoli italiano, en un pase de 18.5 millones de dólares, la cifra más alta jamás pagada por un futbolista desde Chile. La primera estadía de Vargas dentro de Europa fue irregular, viendo la mayoría de partidos desde el banco de suplentes. Por ello, fue incorporado por el Gremio de Porto Alegre en condición de préstamo para el año 2013.
En el equipo brasileño tuvo un buen paso, finalizando como subcampeón del Brasileirão y jugando un total de 36 partidos, anotando diez tantos por el torneo local, para luego encontrar destino dentro de otra de las cinco mejores ligas europeas: España.
En enero de 2014 fue nuevamente puesto a préstamo por el Napoli, en esta ocasión al Valencia pensando en la segunda mitad de la temporada en LaLiga. Un irregular paso por la institución española le dejaría a las puertas de lo que sería la segunda competencia grande en su carrera: el Mundial de Brasil con la selección de su país.
Con Chile, el atacante ya había tocado las mieles del éxito habiendo sido campeón del Torneo Esperanzas de Toulon del 2009 con el seleccionado Sub-21, y era parte regular de La Roja desde su debut en el mismo año. En 2013 había alcanzado el histórico logro de ser el primer y único jugador en marcar durante seis encuentros consecutivos con la Selección Chilena.
Estaba afilado de cara a su primera Copa del Mundo, donde demostraría su capacidad anotadora. Incluido en la nómina de su ex entrenador en la U, Jorge Sampaoli, asistió en el primer encuentro contra Australia por el grupo B, y anotaría en la segunda fecha ante nada más ni nada menos que la vigente campeona del mundo, España, en un histórico triunfo por 2-0 que les valió la clasificación a los octavos de final. En dicha etapa, enfrentando a la anfitriona Brasil, volvió a asistir a Alexis Sánchez para anotar el empate final, que lamentablemente significaría luego la eliminación chilena por la vía de los penales.
Vargas jugó todos los partidos de Chile en el Mundial, marcando 1 gol y dando 2 asistencias en los 307 minutos que disputó, siendo uno de los puntos altos de Chile en su primera competencia grande con la selección mayor.
Luego de un nuevo frío paso por el Queens Park Rangers, reciente ascendido a la Premier League de Inglaterra, donde anotó tres tantos, le llegaría una nueva oportunidad de reinvindicación con su selección, en la Copa América disputada en su país.
En la competencia continental fue inicialmente suplente en el primer partido contra Ecuador, considerando su floja temporada en Inglaterra, y anotaría un gol para sellar el 2-0 definitivo. Volvería a anotar en la segunda fecha contra México, para luego aparecer en las semifinales anotando un doblete para que Chile venciera por 2-1 a Perú y accediera a la final luego de 28 años. En la definición contra Argentina, luego de un discreto partido de su parte, tocó el cielo con las manos al ser pieza fundamental del primer título de “campeón de América” para Chile en toda su historia.
Vargas anotó 4 goles (dos en la fase de grupos y otros dos en semifinales) en 6 encuentros distribuidos en 474 minutos, convirtiéndose en el máximo goleador del torneo junto a Paolo Guerrero de Perú. A su vez, formó parte del equipo ideal de la Copa América 2015.
Luego de aquella gesta, y luego de tres préstamos, fue finalmente vendido por el Napoli al Hoffenheim de Alemania, lo que significaba su paso por cuatro de las cinco grandes ligas de Europa. Anotaría en su segundo encuentro, disputado el 13 de septiembre del 2015, y tardaría seis meses en conseguir su segundo gol, ya en marzo de 2016.
Su segunda Copa América, ya como campeón defensor, llegaría en la edición Centenario disputada en Estados Unidos a mediados de 2016. En esta ocasión, anotaría por primera vez (y en partida doble) en el tercer encuentro de la fase de grupos contra Panamá; en los cuartos de final alcanzaría una de las mayores performances de su carrera, anotándole un póker de goles a México en un histórico triunfo por 7-0.
El 26 de junio se consagraría bicampeón de América, nuevamente venciendo al combinado argentino por la tanda de penales, y Vargas sería nuevamente figura en la competencia: goleador de Chile con seis tantos en seis partidos, y nuevamente incluido en el Equipo Ideal del torneo.
Llegados al ecuador de la temporada europea 2016/17, ficharía por el Tigres de México, donde se consagraría campeón del segundo torneo del año: el Torneo de Apertura 2017, donde anotaría siete tantos y vencería en la final al clásico rival, el Monterrey, donde anotó en el partido final de vuelta.
Su estancia en Tigres contaría con tres años más hasta 2020, donde llegaría a compartir vestuario con Nicolás López. Con el conjunto mexicano terminaría de tener una de sus estancias más fructíferas dentro de un club: en total, dos títulos de campeón de la Liga MX (un Apertura y un Clausura) y dos títulos de Campeón de Campeones, torneo que enfrenta al campeón de liga y al campeón de la copa local, y la consagración continental en la Liga de Campeones de la Concacaf durante 2020. Sus números, interesantísimos: 153 partidos en los que anotó 42 tantos y contribuyó con 18 asistencias de gol.
Aterrizaría nuevamente en Brasil, en su último club hasta el momento: el Atlético Mineiro. Con el equipo de Belo Horizonte alcanzaría su segunda mayor cantidad de minutos (7.735’) dentro de un club, detrás de Tigres, lo que derriba el mito de sus recientes pasos infructuosos dentro del mundo de clubes.
En un total de 167 encuentros (33 goles y 15 asistencias), Vargas se consagraría campeón del Brasileirão y de la Copa do Brasil en sus ediciones disputadas en 2021, en una ocasión de la Supercopa local (2022) y alcanzaría la última final de la Copa Libertadores, donde su equipo caería derrotado por el Botafogo y anotaría el único gol del Mineiro en la jornada en el Estadio Monumental.
Un breve repaso que implica la llegada de un futbolista con experiencia en múltiples ligas europeas, de comprobado nivel goleador en torneos de carácter continental y que se hace nombrar en grandes citas. El segundo máximo goleador de la historia de la Selección de Chile ya está en Nacional, y no tuvo dudas: “Fue algo muy rápido, estaba decidiendo en dónde jugar, estaba la opción de venir acá, y le dije de una a mi representante”.
Juan Lauz
COMPARTÍ ESTE ARTÍCULO:
UNITE A NUESTRA COMUNIDAD
Seguinos en nuestras redes sociales y enterate de toda la actualidad del decano del fútbol uruguayo
REDES SOCIALES
SUSCRIBITE A NUESTRA NEWSLETTER
No te pierdas ninguna novedad del decano