De hincha a coleccionista

Diego Rodino ha logrado reunir una colección de más de 400 camisetas del club, cada una con una historia única. En esta entrevista, comparte su recorrido como coleccionista, las piezas más valiosas de su colección y su sueño de exhibirlas al público para mantener viva la historia tricolor.

Diego Rodino es un ferviente hincha del Club Nacional de Football, cuya pasión se refleja en su impresionante colección de camisetas. En una entrevista exclusiva con Decano, Rodino compartió cómo su amor por el club lo llevó a convertirse en un coleccionista dedicado.

Rodino creció en una familia totalmente tricolor, en la que el único tema de conversación era el club. “Nunca se habló de política, la única política que se habló en mi casa es Nacional. Somos cinco hermanos, mis padres y todos mis sobrinos son hinchas de Nacional”, recordó.

Su afición por coleccionar camisetas comenzó en su infancia. “Siempre quise tener una camiseta, continuamente estaba vestido de Nacional”, confesó. La pasión se intensificó cuando su padre, quien tenía una empresa de entretenimiento, brindó un servicio para Nacional en Los Céspedes. “A partir de 1999-2000, los jugadores empezaron a regalarme camisetas”, comentó.

Así, en los siguientes años, su colección creció sin que él se diera cuenta. Hoy en día, Rodino posee alrededor de 400 camisetas, una cifra que continúa en aumento.

Tesoros emocionales y desafíos en el coleccionismo

Una de las camisetas más valiosas para Rodino es una Fila de 1998, regalo de su padre. «Era cara, y recuerdo la emoción de recibirla porque mi viejo hizo un gran esfuerzo para conseguirla», compartió. Aunque no es de utilería, tiene un valor emocional invaluable.

Entre sus tesoros históricos destacan camisetas de la Libertadores de 1988 y una de la Intercontinental de 1981. También resalta piezas más personales como las del Morro García y Juan Izquierdo. «Lamentablemente, por lo que pasó, esas camisetas ocupan un lugar especial en mi colección», añadió.

Rodino ha pasado mucho tiempo buscando camisetas difíciles de conseguir, como una de New Balance de 1998, que le tomó casi un año obtener.

También ha creado lazos con jugadores, como Thiago Vecino, de quien recibió una camiseta y el cual le sirvió de nexo para obtener indumentaria de Sergio Rochet y Francisco Ginella. “Thiago Vecino, por ejemplo, me ofreció una camiseta y desde entonces tenemos una excelente relación”, contó.

Aunque posee algunas autografiadas, como una de Luis Suárez, no es algo que priorice. “El tema del autógrafo no me gusta mucho, pero esta camiseta tiene un valor especial porque fue la primera que usó Suárez en Nacional”, explicó.

Sin embargo, la camiseta que más anhela conseguir es la Puma de Tokio del ’88. “Se usó en la final de la Libertadores, y aunque Nacional no vestía Puma en ese momento, se dio la oportunidad porque Puma ofreció una buena suma de dinero. Esa camiseta me tiene como loco, ya que representa un gran logro. Aunque tengo una réplica, no se compara”, agregó.

Por otra parte, comenta que busca tener algunas específicas de los jugadores de Nacional que están en el exterior.

Entre sus tesoros, menciona camisetas de Gastón Pereiro, Mauricio Pereyra y del Morro García. También tiene camisetas de Fabián O’Neill, tanto de Italia como de Nacional, que son muy importantes para su colección. «De esas no me desprendo», añade con firmeza.

Asimismo, explica que las camisetas que posee son de utilería, usadas y regaladas por los jugadores lo cual las hace más especiales. «Tienen detalles únicos y se hacen en cantidades limitadas, lo que las hace aún más especiales».

La evolución de las camisetas: Antes y Ahora

Rodino reflexiona sobre cómo han cambiado tanto la textura del escudo como el diseño de las camisetas a lo largo de los años. «Han habido muchos errores en los últimos años que el coleccionista, de alguna manera, los marca. Por ejemplo, la tipografía puede variar. He visto escudos que no son del año de la camiseta, algunos incluso pintados a mano», comenta.

“Antes, los detalles eran más artesanales, los números estaban cosidos a mano y había un arte que se ha perdido con el tiempo”, menciona. A pesar de que hay camisetas actuales que le gustan, como la del Morro García, insiste en que prefiere las camisetas de los 80 y 90, que considera más especiales por sus detalles y calidad.

Consultado sobre su favorita, mencionó las de Adidas de los 80. «Son sencillas, no tienen mucho detalle, pero el escudo es todo», afirmó.

También destaca la camiseta de 2005, que considera de las más lindas de Nacional del 2000 en adelante. «Es una camiseta que, para todos los hinchas y coleccionistas, es de las más buscadas», confirmó.

Algo que remarca es que como coleccionista se enfoca mucho en los pequeños detalles “hay muchos detalles y uno cuando después se pone a coleccionar, ves detalles que otra gente no ve”, explica.

Algo en lo que se fija mucho es en la tipografía y un aspecto que considera un defecto el cual intenta corregir. “Este año decidí poner un freno y para el año que viene planeo coleccionar una de cada color y ya está. Pero siempre hay algo que cambia. Para el coleccionista, cada detalle cuenta, y aunque sea solo un pequeño parche o el cambio en la tipografía, transforma la camiseta”, concluyó.

Top Tres de Camisetas Umbro

Rodino también compartió su top tres de camisetas Umbro: “Las de este año, junto a la del 2004, que es muy parecida a la del «cuellito», el año en que jugó Abreu. Esa camiseta es hermosa y este año intentaron replicarla. También me gustó mucho la de 2008, aunque no la tengo. La de este año es significativa por todo lo que representa y por el trabajo de Umbro con Nacional. Estoy muy contento con su labor. Por mí, que sigan 20 años más”.

Fanáticos y el valor de compartir la historia

Rodino ha encontrado en las redes sociales un canal para compartir su pasión. A través de su cuenta de Instagram, recibe mensajes de fanáticos que quieren conocer más sobre la historia de Nacional o adquirir alguna camiseta. «Muchos me escriben, sobre todo jóvenes, y me gusta compartir la historia», comentó. A pesar de recibir ofertas del exterior, Rodino prefiere que sus camisetas permanezcan en Uruguay. «Me han ofrecido hasta tres veces más por una camiseta, pero siempre trato de que queden acá», explicó.

Este enfoque se basa en su deseo de mantener viva la historia del club y compartirla con las nuevas generaciones de hinchas. «Me escriben muchos gurises que no conocen la historia y quedan helados cuando ven algunas camisetas», añade con orgullo.

El sueño de exhibir su colección

A pesar de que en el pasado no se sentía preparado para exhibirlas, hoy asegura que tiene la cantidad y calidad necesarias para hacerlo. «Hoy en día, si sale una exhibición o una exposición sea donde sea, creo que estoy a la altura. Me gustaría exponer algo, pero como soy del interior, es medio complicado», explicó.

Sin embargo, espera que en el futuro pueda exponer su colección, especialmente en eventos tricolores. «Que me tengan en cuenta para alguna jornada o un Mayo Tricolor, sería un sueño hecho realidad», concluyó con entusiasmo.

Vanesa Baliero