Pablo Budna explicó algunas de las aristas de su trabajo como scout, y su actualidad como secretario.

El secretario técnico de Nacional, Pablo Budna, pasó por 100% Deporte y tocó una gran cantidad de temas, la mayoría relacionados con su trabajo en el club y el trabajo de scouting.

Ante la duda que surgió en el momento de su asunción en el cargo, confirmó que “es similar al que ya ejercí en Boca. Una parte deportiva que está más relacionada al armado del plantel y al conocimiento de jugadores y mercados; después vamos sumando otras funciones, ahora estamos con Seba Eguren y Martín Liguera trabajando con la parte de los juveniles”.

Sobre los momentos previos a asumir y ya en el cargo, afirmó: “Estos primeros meses quería hacer un conocimiento exhaustivo de las categorías mayores de Nacional. Porque siempre pasa que llega el libro de pases que te dicen que necesitamos esto, y capaz lo tenemos en casa”.

“Por un montón de circunstancias tenía ganas de hacer algo como esto”, contestó ante la consulta sobre sus motivaciones para llegar a Uruguay, y reveló el trato que tuvo con el vicepresidente del club: “Me llamó Flavio (Perchman), a quien conozco hace muchos años, nos juntamos y me dijo que se iba a tirar como vicepresidente de Nacional. Esto fue antes de que arranque campaña, faltaban dos semanas”.

Adentrándose en cuestiones que maneja de su trabajo como scout, manifestó que ya conocía a algunos de los futbolistas del plantel: “Hace más de 20 años que vengo acá por trabajo. He visto miles y miles de jugadores, al Diente (López) y Polenta los conozco de muy chicos, desde la Sub-17. Después vienen los detalles y la idiosincrasia, que vas aprendiendo. Me estoy adaptando”.

“En principio es el scouting, búsqueda y conocimiento de jugadores. Para eso necesitás estar acá y conocer el plantel, qué quiere el club y el entrenador, la cuestión personal de dónde creo que hay falencias y virtudes. Y asesorar, ayudamos a la toma de decisiones’’, e indicó que está “todo el día en Los Céspedes, hablamos con el cuerpo técnico y con Eguren. Es todo muy natural”.

Acerca de si tuvo alguna incidencia en alguna de las llegadas de jugadores en este período de pases, confesó: “Yo estaba en Buenos Aires y aún no había llegado acá, Flavio se reunió con el cuerpo técnico y le pregunté que estábamos buscando. Le hablé de (Julián) Millán, que lo conocía y había muchos equipos que lo querían”, y le dedicó elogios al trabajo de negociación de Perchman: “Flavio es un tipo muy expeditivo, que fue y a las 48 horas ya estaba el jugador. Las negociaciones que no tardaron son las que se terminaron cerrando. El conocimiento que tiene Flavio del mercado es súper importante y suma muchísimo a mi trabajo’’.

“Tengo entendido que fue un cambio en la política deportiva de Nacional. Creo que se hizo un buen trabajo y me gusta lo que terminó formando el club’’, declaró.

Además del Diente y Polenta, futbolistas ya consagrados, no ocultó su conocimiento sobre algunos de los juveniles: “A chicos más cercanos a Primera División ya los conocía, yo había estado acá hace un tiempo y los había visto en Quinta División. Los casos de (Paolo) Calione, (Gonzalo) Petit y al Magia (López), por ejemplo. Muchos de ellos los conocía solo por ver jugadores’’.

Cuestionado por el uso de datos en la búsqueda de jugadores y el análisis del juego, decidió no tomar postura y mencionar que “es relativo”, y amplió: “Hay un montón de cuestiones de los datos que me parecen interesantes y hay que saber analizarlos. Creo que hay en el mundo del fútbol una sobreinformación extrema en determinadas situaciones; (pero) es tan global el mercado ahora, que los datos te pueden ayudar es en que te puede llegar otro tipo de información que puede achicar el círculo de búsqueda’’.

Con relación al trabajo de captación, explayó las diferencias entre trabajar en un equipo del poder económico el Arsenal y el Manchester United (equipos con los que trabajó en el pasado) con Boca Juniors: “Hice trabajos diferentes, pero cuando trabajás para un equipo inglés y tan grande en el mundo, lo que se busca es a los mejores jugadores del mundo o los que pensás que pueden llegar a serlo. En Boca toda la parte de captación es distinta, porque empezás a buscar desde muy pequeños, para luego formarlos’’, y agregó: “Estuve a cargo un año de la captación de Boca, y se prueban entre 30.000 y 50.000 chicos durante ese año’’.

En cuanto a sus anteriores trabajos en Inglaterra y las diferencias entre ellos, consideró que “fueron etapas diferentes y clubes diferentes”, sobre su labor en Arsenal, transcurrido en 2007 En Arsenal fue el año 2007, solo tuvo alabanzas: “Un club extraordinario y una cabeza extraordinario como Arsène Wenger, pero la estructura interna era distinta; éramos muchos menos, y con un trabajo más directo, éramos uno o dos que mirábamos y decidía el técnico’’.

Mientras, dijo las siguientes palabras sobre su período en el Manchester United: “Fue un proceso que inició hace nueve años, era algo nuevo que ellos armaron. Una estructura de scouting muy grande, éramos 40 en el mundo aproximadamente. Había mucha gente y competencia. Y cuando hay tanta información y gente, es más complejo resolver la toma de decisiones’’.

Sobre cómo un scout puede detectar a un buen futbolista, respondió que “lo primero que se observa son las condiciones físicas, como la altura” y que “siempre hay algo que llama la atención, y ahí empieza a rodar el ojo. Recuerdo que mi primer jefe del Arsenal me dijo ‘donde vos veas una característica extraordinaria de un jugador, vos avísanos, después ayudamos; hoy en día hay que fijarse mucho en las edades’’.

También contó una intimidad de su trabajo, relacionada Emiliano “Dibu” Martínez, arquero titular de la Selección  Argentina, a quien captó en su momento trabajando para el Arsenal: “Era un chico que lo habíamos visto en el Sudamericano, y cuando los chicos son juveniles y no han tocado Primera, la idea es llevarlos a Londres y tenerlos con nosotros diez días. Él no sabía nada, Independiente lo cita para una renovación de contrato y decirle que en 48 horas viajaba a Arsenal. Yo estaba en una oficina al lado y me hicieron entrar como sorpresa. Viajamos para allá y terminamos de verlo’’.

Acerca de las cualidades del arquero campeón del mundo, destacó ‘’su personalidad; era una cabeza muy fuerte y con ganas de aprender. Después es todo mérito de él, hoy es el Dibu Martínez, pero él empezó a jugar a los 30 años’’.

“Cuando un jugador es muy bueno, pero no llega a esa categoría de extraordinario, sé empieza a ver lo mejor a los 23 o 24 años, y alcanza su madurez a los 26 o 27’’, aseveró.

Volviendo al caso de Julián Millán, indicó que “con su caso tuvimos un poco de suerte, porque quería salir de Colombia y se actuó rápido. Ojalá los procesos de adaptación sean los más cortos posibles, él se bajó del avión y ya quería arrancar”, y no olvidó que “jugó tres clásicos en veinte días’’.

“Lo conocía. Lo había visto el año pasado en Boston River, donde tuvo un buen año”, arrancó hablando sobre la figura de Bruno Damiani, quien hoy se confirmó su venta al fútbol de los Estados Unidos.

“Tiene características interesantes tanto como jugador como persona, pero creo que le va a venir bien el cambio si es que está todo cerrado. La competencia iba a ser ardua’’, y subrayó el proceso que atravesó el centrodelantero: “Me parece que ahí hay un buen trabajo en general; un chico que estuvo a préstamo y le fue bien, que volvió, lo tuvimos e hizo una gran pretemporada, y después el mercado te va marcando’’.

“En Nacional se habló mucho de la parte extremos. Estábamos en la búsqueda de uno y llegó Lucas Villalba, con unas características poco comunes en Uruguay; cuando uno busca armar el plantel, buscás características distintas y alternativas’’, remarcó en relación a otra de las incorporaciones.

Sobre el caso de Rómulo Otero, quien aún no se ha sentido del todo cómodo dentro del esquema de Martín Lasarte, resaltó que «Lo que puedo decir con respecto a Otero es que tiene que estar cerca del arco. Después si tiene que estar atrás del 9, tirado a la derecha o a la izquierda, bueno, pero cerca del arco porque con la pegada que tiene debe ser una amenaza frecuente’’.

“Lo vi jugando en Quinta, y vine a ver específicamente su evolución el año pasado en un partido de Reserva contra Torque”, apuntando sobre Gonzalo Petit, hoy en la Selección Uruguaya Sub-20 en el Sudamericano.

“Es un chico con mucho potencial, que hay que ayudar a desarrollarlo. Desconozco cual es su techo, y hay una cuestión también de posicionamiento. De lo que yo ví de él en el pasado, cuando entra al área es letal’’, acentuó.

Cerró charlando sobre su actual vida en Uruguay y en Nacional: ‘’Siempre mirando mucho fútbol, a veces hay que cortar. Pero desde que llegué a Uruguay estoy enfocado en Nacional; vine solo, no estoy con mi familia y mis hijas siguen estudiando en Buenos Aires. Un momento estás en Los Céspedes, después cuando arranca el Campeonato voy a tener que ir a estadios’’.

Juan Lauz

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