En 2024, la gesta de Colombes se «suavizó» para evitar entrar en controversias, ir al choque, generar molestias o vaya a saber qué, pero lo que pasó, pasó. Y ellos lo saben.
En 1924 la selección uruguaya viajó a París con la intención, esperanza, de participar en los JJOO (hecho que fue ratificado recién en plena travesía).
En 1924 hacía ya dos años que el Club Atlético Peñarol había sido expulsado de la AUF.
En 1924 Julio Mª Sosa era el presidente de Peñarol, además de presidente del Consejo Nacional de Administración, un órgano nada menor dentro del organigrama del Estado.
En 1924, el Dr. Atilio Narancio, presidente de la AUF, fundador y futuro presidente de Nacional, honraba su palabra dada a los futbolistas campeones del Campeonato Sudamericano.
En 1924, el Dr. Narancio hipotecaba una propiedad suya para comprar 26 pasajes en barco hacia Europa, acto indispensable para cumplir la promesa contraída.
En 1924, el presidente de Nacional, Numa Pesquera, extendió un cheque en blanco para apoyar el sueño gestado en la AUF.
En 1924, el ya mencionado Dr. Sosa hizo todo lo que estaba a su alcance para abortar ese viaje, con la complicidad del Comité Olímpico Uruguayo.
En 2024, Uruguay viajó a París a participar de los JJOO de 1924 (no existieron para los comunicadores contemporáneos, todas las trabas políticas que tuvo que sortear Narancio)
En 2024 Narancio, Pesquera y Sosa son borrados de un plumazo (nunca mejor utilizada la expresión) por la prensa uruguaya, con el silencio cómplice de la AUF.
En 2024, para Ovación la gesta de 1924 «empezó como una aventura de un grupo de dirigentes y futbolistas». No hay mención a la promesa de Narancio, ni a su accionar y mucho menos al gesto de Pesquera.
En 2024, la nota -sin firma, aunque podemos suponer de qué pluma cayó- de Ovación, está más ocupada en entronizar Colombes como título mundial -que lo fue- que en destacar la gesta.
En 2024, en nota de Referí – esta sí, firmada por Inzaurralde- éste insiste con el valor de la gira previa por España, marcando que estos encuentros «permitirían financiar el viaje». Viaje que ya estaba pagado por la valiente y desinteresada actitud de Atilio Narancio.
En 2024, la misma nota de Referí hace mención a Asdrúbal Casas (delegado de la AUF), Casto Martínez Laguarda, (dirigente) y a Leonidas Chiappara, uruguayo radicado en Francia de gran importancia en las gestiones en París, pero no tiene ni una línea sobre Narancio o Numa Pesquera.
En 2024, la antedicha nota, en su encabezado, se autorefiere como «Los increíbles detalles de la historia del primer Mundial de fútbol…» Para ser honestos, le faltaron algunas puntualizaciones.
En 2024, la gesta de Colombes se «suavizó» para evitar entrar en controversias, ir al choque, generar molestias o vaya a saber qué, pero lo que pasó, pasó. Y ellos lo saben.
Foto: CONMEBOL
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