Salud, campeonas

Nacional se consagró Campeón Uruguayo de futsal femenino.

Aparte de su historia cargada de gloria lo que hace grande a Nacional como club deportivo, es su destacada actuación en varias disciplinas. Si bien los logros a nivel de fútbol masculino suelen opacar lo hecho en básquetbol o futsal -por citar ejemplos-, siempre nos enteramos sobre un nuevo campeonato del bolso en otros deportes, y no es algo menor.

Esta vez fue en el ámbito del futsal femenino, donde el Decano se consagró campeón uruguayo y clasificó a la Copa Libertadores.

Un poco de historia

Si bien la primera edición del Campeonato Uruguayo de futsal femenino se jugó en 1997 -en la que Nacional quedó tercero-, hubo que esperar siete años para volver a la actividad. Se jugó de forma interrumpida entre 2004 y 2011, con idas y venidas, logrando establecerse de manera oficial a partir de este último año.

Quien tomó las riendas entonces fue el mítico golero, campeón de América y del Mundo en 1988, Jorge Fernando Seré. Bajo la batuta de Superman, Nacional llegó de manera consecutiva a las últimas cinco finales del Campeonato Uruguayo, alzando la copa en 2013 y 2017.

Estadísticas

El Decano tuvo una campaña para el recuerdo: Ganó tanto el Apertura como el Clausura y los Playoffs. Además, constituyó un plantel joven y fuerte: De las 22 futbolistas, once son categoría sub-20 y seis son sub-23. Un dato significativo si se tiene en cuenta la Copa América que se disputará en noviembre -con gran presencia de jugadoras de Nacional- y la proyección para futuros campeonatos. Además, debemos anotar el nombre de Naiara Ferrari, goleadora del torneo con 24 tantos en 17 partidos.

Entre los dos torneos cortos y los playoff, nuestras flamantes campeonas uruguayas disputaron 17 partidos, de los que ganaron 14 y perdieron 3. Con 124 goles a favor y 41 en contra, le sacaron ventaja a su más inmediato perseguidor Río Negro City.

Las chicas del futsal dieron una clase de amor por la camiseta y demostraron, una vez más, que Nacional es más que fútbol.

¡Salud, campeonas!