16 de marzo de 2025

El Bolso no jugó su mejor partido, pero logró un triunfo ante un gran rival, en una cancha complicada y sigue sacando ventaja ante el máximo rival y peleando arriba en la tabla. 

Primera mitad pareja. El Bolso realizó algunas modificaciones derivadas del mal juego realizado el partido pasado ante River Plate. Además, faltaba Christian Oliva por acumulación de amarillas. Este combo hizo que Martín Lasarte dispusiera una figura táctica de 4 3 1 2. Jeremía Recoba dejó su posición habitual de carrilero y pasó a volantear más al centro al costado izquierdo de Yonatan Rodríguez, el sustituto de Oliva. Luciano Boggio jugó al costado derecho de Yona; Mauricio entró a jugar detrás de los dos delanteros que fueron Nico López y Diego Herazo. La primera mitad fue de ida y vuelta.

Por momentos el Bolso logró imponer su juego, y por momentos sufrió atrás. De hecho, hubo una jugada de gol bien anulada al rival por offside que fue una alerta importante. El Bolso generaba, pero no concretaba, aunque también le generaban. Hasta que en una buena jugada Herazo definió de gran manera para poner el primer y único gol del encuentro. Hubo una posibilidad clara tras una gran combinación de todos los atacantes del Decano, que increíblemente el golero le saca un cabezazo en la raya a NIco. Nos fuimos al descanso ganando, pero el encuentro se notó con mucha paridad en el juego.

A defender. La segunda mitad fue totalmente distinta. Racing tenía dos delanteros por dentro y soltaban por ambos carriles a sus jugadores, lo que hacía que la línea final estuviera casi mano a mano permanentemente. Esto hizo que Lasarte dispusiera una modificación en la última zona, para tener superioridad numérica y que los laterales se ocuparan de su sector y no tuvieran que preocuparse tanto en cerrar por adentro. Esto salió bastante bien porque el ingresado Paolo Calione jugó un gran partido y dio seguridad por arriba y por abajo.

Lo que no estuvo bien fue jugar tan hundidos en defensa y metidos atrás. Ahí estuvo el gran error del equipo que terminó dejando venir al rival, sacando la pelota muy cerca del área y no pudiendo salir nunca de contragolpe. A la postre salió bien, pero fue un gran riesgo que se corrió. La línea de 5 por si, no tiene por qué llevar a hundirte en la última zona. Al contrario, te permite desplegar juego por las bandas con los laterales y quedar bien parados atrás, pero entre el cansancio y el instinto de supervivencia de cuidar lo conseguido, no se pudo salir de atrás.

Se ganó y es lo importante. Lo más importante fue el triunfo que permite sacar más ventaja al tradicional rival, y quedar peleando en la zona de arriba de la tabla. Hay mucho para corregir, pero siempre es mejor corregir sobre los triunfos. Los errores son much0s y las cosas a trabajar y mejorar también. Esperemos se vaya encontrando regularidad tanto en el juego como en los resultados como para poder ir creciendo como equipo, y llegar bien a la Copa, cuyo comienzo es inminente.

¡Arriba Nacional!

Diego Ávalo

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