Tiene cara de hereje

La necesidad de recaudar dinero, llevó a Nacional a arrendar el GPC para tres espectáculos en un período corto de tiempo. ¿Cuáles fueron las secuelas para nuestra casa?

Existe coincidencia entre los dirigentes tricolores en que, de no estar necesitados de recaudar, nunca se hubiera aceptado alquilar el Gran Parque Central (GPC) para tres eventos separados por un lapso de cinco días, pero “la necesidad tiene cara de hereje” como reza el dicho.

Si bien existe una intención manifiesta de posicionar al estadio como el principal escenario para espectáculos abiertos del país, el Gran Parque Central es, ante todo, el escenario deportivo tricolor.

Con la intención de tener información de primera mano acerca del estado de la cancha e instalaciones luego de los tres eventos que se sucedieron entre el 18 y el 22 de abril pasados, nos pusimos en contacto con Walter Echenique, presidente de la sub-comisión del Gran Parque Central y con Adriana Araújo, gerenta de operaciones del Club Nacional de Football.

Según nos manifestó Echenique “el Parque se protegió como se hizo en eventos anteriores. La primera mitad de la cancha -desde la Héctor Scarone hacia la Abdón Porte que es en el sector donde van apoyadas las sillas- se colocaron unas placas plásticas. El resto del campo se protegió con unas lonas especiales”, aunque agregó que “mi pedido inicial -que formó parte de las exigencias del contrato con la productora- fue que se trajera una lona que cubre todo el campo, que se utiliza en los espectáculos que se desarrollan en el Morumbí. Lamentablemente los organizadores de los espectáculos no pudieron conseguirla, por lo que tuvimos que recurrir al plan b, que es en definitiva el que hemos utilizado siempre.”

Sobre el estado en general del césped, Echenique nos expresó que “el terreno quedó desparejo pero de todos modos no va a haber inconveniente para el partido ante Fénix, porque el campo no está poceado, simplemente manchado. Hemos sido cuidadosos con lo que tiene que ver con los apoyos de los mangrullos (torres de sonido e iluminación) y demás. No permitimos que los escenarios se armen desde la cancha hacia la tribuna, para evitar un exceso de circulación sobre el campo”.

Por su parte, Adriana Araújo nos dio un informe de lo hablado con los ingenieros Salvador Invernizzi y José Luis Pareja y el canchero del Parque, Alejandro Pelegrino, quienes consideran que “la zona que quedó cubierta con el protector de piso -luego de estar tapado prácticamente durante seis días- quedó en muy buen estado. Incluso nos comentaron que se creó una especie de efecto invernadero que potenció el crecimiento del pasto. En cambio, la zona que quedó cubierta por la lona -que es el sector de 3/4 de cancha hacia la Abdón Porte-, se vio un tanto deteriorada en lo que tiene que ver con el color del césped. Según Invernizzi, para recuperar rápidamente este sector es necesario recurrir al riego, abundante agua y fertilización”.

Finalmente, preguntados acerca del trascendido acerca del supuesto forzado de un portón en el recital de Romeo Santos, tanto Echenique como Araújo nos aseguraron que no tenían información sobre ningún daño”.    

Ernesto Flores

decano.com