Como cada 13 de setiembre el Club Nacional de Football homenajeó a sus asociados que arribaron a los 30, 50 y 75 años de permanencia en sus registros sociales.

El acto dio comienzo con la palabra del presidente de la institución Ec. Eduardo Ache, quien  recordó que “el 13 de setiembre marca un punto importantísimo en la historia de nuestro club. Una historia donde no hay dudas, en la que todo es auténtico y genuino. Donde no debemos dar explicaciones. En la que no hay confusiones».

Ache centró su locución en el agradecimiento.  “A quienes entendemos son los protagonistas más importantes que tiene nuestra institución. Los socios» y finalizó su intervención diciendo que todos quienes estamos acá sabemos que esta pasión se transmite de padres a hijos, de generación en generación. Y es precisamente esa pasión la que, en un fútbol cada día más comercial, donde cada vez hay más intereses, mantiene viva nuestra institución. Por eso queremos agradecerles, en nombre del Club Nacional de Football».

Luego le tocó el turno al Cr. Juan José Melos, integrante de la Comisión de Historia y Estadísticas, quien entregó una semblanza de Prudencio Miguel Reyes, el primer hincha del fútbol. Melos comenzó diciendo que «nos toca a nosotros presentar en sociedad al primer hincha del fútbol mundial. Que, como no podía ser de otra manera, fue uruguayo y tricolor».

«Don Miguel Prudencio Reyes era un robusto paisano, de oficio talabartero, cuya misión era -en el Club Nacional de Football- darle aire a los balones con los cuales se disputaban los partidos» continuó, y aportó algunos datos sobre este personaje y el origen de la palabra “hincha”: «Este señor tenía una estentórea voz. Ya era conocido por su participación en el club Euskal Erría, donde se encargaba de cantar los tantos, una práctica muy habitual en el juego de pelota».

«Don Miguel comenzó a seguir el movimiento de los jugadores de Nacional a través de la platea, alentándolos con su poderosa voz. Esto llamó la atención y muchos comenzaron a preguntarse «¿quién es éste que grita?». Quizá alguno habrá contestado «es el que hincha las pelotas en Nacional». De ahí a «el hinchador» y al diminutivo «el hincha» hubo un solo paso. Posteriormente el término se arraigó en nuestro medio, cruzó el charco y de allí al mundo, donde el sustantivo logró hasta un lugar en el diccionario de la Real Academia Española donde figura como un sinónimo, entre otras cosas, de fanático».

A continuación, aprovechando que el bisnieto de Prudencio Reyes, Ernesto Reyes Maeso, recibía la medalla de sus 30 años como socio, el Club Nacional de Football decidió hacerle un homenaje a Prudencio descubriendo un cuadro con su retrato.

Para finalizar, Juan José Melos hizo hincapié en que «en este homenaje va un reconocimiento a todos nosotros ¿Quién no se mojado hasta los huesos, o abrasado al sol como seguramente le pasó a Don Prudencio por ver a Nacional?”.

Luego de terminados los discursos se proyectó en una pantalla gigante la versión rock del tango “Nacional” que produjera nuestro sitio con la colaboración de la banda Cordero ReVelde e inmediatamente dio comienzo la entrega de los Doble Atilio de Diamante para quienes llegaron a sus 75 años de socios, las medallas correspondientes a los 50 años en el registro social y las insignias para quienes cumplieron 30 años como asociados.

Una asistencia que colmó completamente el Salón Dante Iocco y llegó prácticamente hasta la puerta de la sede demostró una vez más que Nacional es el club más democrático, participativo e inclusivo de Uruguay

Ernesto Flores
decano.com

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