Ahora sí, así queremos a Nacional siempre, metiendo, jugando, y defendiendo a cara de perro. Levantamos mucho y ganamos un partido dificilísimo.

Presión arriba. Alejandro Cappuccio dispuso modificaciones en nombres, en lo táctico, y también en lo estratégico. Y la verdad es que dieron su fruto. El ingreso de Alfonso Trezza y de Joaquín Trasante le dio al equipo una intensidad para marcar que le permitió ejercer una presión alta, que en varias oportunidades le dio buen resultado. El conjunto de Liverpool paró un 4-1-4-1 y por eso el técnico tricolor dispuso tres volantes en el centro de la cancha, con la idea de controlar la zona de gestación del equipo rival, que era en el mediocampo. Y con esa táctica y esa estrategia se comenzó a ganar el partido. Nacional fue muy superior a su rival, ganando permanentemente en la mitad de la cancha y robando pelotas lejos de su propia valla y cerca de la del rival. Pese a esto, el Bolso se fue al vestuario ganando 1 a 0 con un gol de córner porque si bien contó con jugadas para ampliar el marcador, la mala puntería en algunas jugadas o la incidencia clara de Andrés Cunha que no cobró dos penales claros, no permitieron ampliar ventajas, que hubiera sido lo más justo. 

Algo más retrasados. El segundo tiempo tuvo a un equipo algo más retrasado en el campo, pero a pesar de eso, estuvo compacto y agresivo para recuperar. A diferencia del partido anterior, en el cual fuimos muy críticos por la actitud y por la falta de entrega, en esta oportunidad fue todo lo contrario. Quizás lo intenso del segundo tiempo no permitió seguir marcando en zona alta, y se retrasó algo, pero reiteramos, Liverpool no encontró casi nunca espacios para inquietar la última zona. Y cuando lo hizo, ésta estuvo muy firme al igual que el mediocampo. Además, hubo mucha colaboración de Brian Ocampo y Alfonso Trezza por las bandas que ayudó y mucho al equipo. 

Gran partido. La verdad es que fue un gran partido de Nacional en todo sentido. Desde lo anímico, en donde había quedado una feísima sensación, desde lo defensivo, y mejoró mucho, y también en lo ofensivo, en donde claramente se generaron jugadas, combinaciones y oportunidades de gol. Guzmán Corujo fue la figura y con varios cuerpos de distancia. No solo por haber convertido el gol del triunfo, sino por todo lo hecho en zona defensiva. En el centro de la cancha, el ingreso de Joaquín Trasante fue fundamental para mejorar en esa zona. Y también Brian Ocampo tuvo un gran partido, tanto en lo ofensivo, y, sobre todo, en lo defensivo, en donde colaboró y ayudó a mantener el arco en cero. Además, Alfonso Trezza tuvo un gran encuentro, al igual que Emiliano Martínez, Gonzalo Bergessio y Armando Méndez que jugó por derecha y por izquierda y estuvo muy firme. Gran partido de todo el equipo, que tiró, en gran parte las dudas del anterior contra Cerrito, y que permite seguir prendidos bien arriba en la pelea de la Tabla Anual. Así sí, muchachos. 

¡Nacional nomá!

Diego Ávalo

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