Integraron durante años un tridente ofensivo letal que acumuló goles a través de varias categorías. Fueron campeones en Quinta y de la edición 2011 de la Punta Cup.
Renato César por el sector derecho, Gonzalo Bueno desbordando por izquierda y Nicolás López en el centro del ataque eran el arma ofensiva de la categoría 93 de Nacional. Bueno y López hicieron juntos todas las formativas, César se les unió en el 2009 y el presente de los tres está en el fútbol europeo, al que llegaron de diferentes maneras y en el que tienen distintas realidades.
Nicolás López está en el fútbol italiano desde octubre del 2011. Su arribo a la península se produjo tras un episodio confuso, lamentable y lamentado, que involucró un enfrentamiento entre su representante, Pablo Bentancur y el presidente de Nacional, Ricardo Alarcón. Bentancur prácticamente “secuestró” al joven delantero y logró su fichaje por el AS Roma, pagando solamente la cláusula de recisión del contrato, valuada en un millón de dólares más los derechos de formación, por los que Bentancur desembolsó doscientos cincuenta mil euros extras.
Nicolás López “el Diente” había debutado en el primer equipo de Nacional el 24 de abril, con apenas diecisiete años, ante Central Español en el Parque Central por el Torneo Clausura 2011. Venía de ser el goleador de la Punta Cup y el Campeonato Uruguayo de Tercera División y confirmó su fama de goleador anotando el tercer tanto tricolor a los treinta y un minutos del complemento. En su primer partido oficial con la Roma, en agosto de 2012, suplantó a Francesco Totti a cinco minutos del final y con una impresionante volea, después de un “sombrerito” en el área, decretó el empate definitivo. El debut no podía ser mejor.
A pesar de todo, López no logró afianzarse en la Roma y fue cedido al Udinese, club con el que anotó tres goles en catorce partidos disputados. Desde agosto de este año está a préstamo en el Hellas Verona de la Serie A italiana con una opción de compra definitiva de 3,50 millones de euros. En su nuevo club, Nico lleva anotados dos goles. El primero en la derrota 1-3 ante el Milán el pasado 19 de octubre, cuando convirtió a los quince minutos de haber ingresado desde el banco y el más reciente en la goleada que el Verona sufrió a manos del Nápoli por 6 a 2 el pasado 26 de octubre. En esta ocasión López puso el transitorio empate a dos para su equipo.
Gonzalo Bueno compartió con Nicolás López el trayecto por todas las divisiones juveniles del club. Debutaron en primera en el mismo año 2011 con algunos meses de diferencia. Gonzalo haría su presentación oficial –al igual que “el Diente”- en el Gran Parque Central un 4 de junio de 2011 ante Rampla Juniors. A diferencia de López, Bueno se tardaría hasta su segundo partido para dejar por primera vez su marca en las redes. Fue en la victoria por 4 a 0 ante Cerro Largo. El “Zorrito” tomó el lugar de Tabaré Viudez a los treinta minutos del segundo tiempo y anotó el segundo gol tricolor.
Con diecisiete goles convertidos en sesenta partidos entre las temporadas 2011-2012 y 2012-2013, Gonzalo Bueno emigró para el fútbol ruso y se alistó en el Kuban Krasnodar, club que comprometió US$ 4,5 millones por su fichaje en una operación que enalteció la figura del futbolista, quien se negó a salir del club que lo había formado en las mismas condiciones que Nicolás López.
La situación de Gonzalo Bueno difiere de la de Nicolás López pues, si bien “el Zorrito” también ha tenido pocas oportunidades y no ha logrado convertir en partidos oficiales, la intención del Kuban Krasnodar era la de ir logrando la aclimatación del juvenil al fútbol ruso para insertarlo definitivamente en el equipo a partir de mayo del 2015. Gonzalo Bueno estuvo en Uruguay –donde se sometió a una intervención quirúrgica- hasta el pasado lunes 27 de octubre. Luego de pasar los primeros diez días de su recuperación en su país regresó a Rusia con la intención de buscar una solución a su falta de actividad. No se descarta que el futbolista sea cedido a préstamo por seis meses a alguna otra institución.
El último integrante de la delantera juvenil goleadora en emigrar fue Renato César, quien tras de haber debutado en la misma fecha que Gonzalo Bueno -4 de junio de 2011- recaló en el fútbol suizo, más precisamente en el Lugano, a mediados del presente año, en una cesión sin costo con opción a compra. Nacional apostó a que César despegue en el fútbol helvético y así poder hacerse de un dinero cuyo monto aún no ha trascendido.
La carrera de César difiere bastante de la de los dos anteriores. Nunca logró adueñarse de la titularidad, debido mayormente a una serie de lesiones que le impidieron tener asiduidad en el primer equipo tricolor. Su producción goleadora fue decayendo de tres anotaciones en el 2012 a una por el Clausura 2013 y en el 2014 solo logró convertir en un amistoso ante Atlético Rafaela por la Copa Antel. Cuando comenzaba a destacarse en la pre temporada que el equipo de Álvaro Gutiérrez inició para encarar el Campeonato Uruguayo 2014-2015 y parecía que dejaría atrás definitivamente su permanencia en sanidad, sufrió una fractura de muñeca en un encuentro amistoso ante la selección de San José.
En el Lugano, César parece haber encontrado las oportunidades que en Uruguay se le venían negando. Si bien aún no ha anotado, lleva disputados nueve encuentros, repartidos entre la Copa Suiza y la Challenge League.
Tres inicios en común, una misma camiseta que los une y una actualidad distinta para cada uno, pero, sin duda un futuro por escribir y firmar con goles, ésos que traen de la cantera tricolor.
Ernesto Flores
decano.com
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