Así será el mediocampo tricolor

El medio de la cancha es el corazón del equipo, donde se gesta el fútbol y desde donde se comienza a ganar los partidos.

Seguramente Martín Lasarte intente utilizar lo bueno que hizo el medio de la cancha en la temporada anterior y plante en cancha la misma figura táctica que Gustavo Munúa. Por allí no habría mayores variantes. Leandro Barcia jugaría por la banda derecha, Gonzalo Porras y Santiago Romero compartiendo la zona media, y por izquierda Kevin Ramírez. La duda puede llegar a estar si el Colo, que es pretendido por varios equipos, termina emigrando.

Hoy en día tenemos a Felipe Carballo que el año pasado comenzó a tener minutos y de a poco se ganó un lugar en el plantel con muy buenos minutos. Además se sumó Sebastián Rodríguez que en semestre pasado fue uno de los mejores volantes del medio. Si no hay bajas la zona central estaría bien cubierta. Quizás lo que sí estaría faltando son alternativas en ambas bandas.  Ante las ausencias de Barcia o Ramírez, el equipo nunca pudo sustituirlos. Por lo que he visto en la prensa no se manejan incorporaciones en esas posiciones y creo que podría ser un error. Si bien no hay actividad internacional, las lesiones siempre están presentes y creo que un plantel debe tener al menos dos alternativas por puesto. Además esto hace que el titular se esfuerce para no perder el puesto y eleva el nivel de cada jugador.


Creo que la mayor diferencia para esta temporada se verá en cuanto al estilo de juego. El equipo de Munúa intentaba la posesión del balón y a partir de la rotación del esférico y la tenencia, se buscaba profundizar por las bandas. Los equipos de Lasarte generalmente intentan hacerse fuertes a la hora de defender en la zona media para luego buscar la profundidad de manera más punzante y rápida, sin tanto toque de balón hacia los costados. 

Como dije anteriormente, considero a la zona central como el corazón del equipo. Lo bueno del Decano  es que hay una muy buena base de jugadores que, seguramente en su mayoría, seguirán en la institución. Esto hace que los retoques sean mínimos  y que a diferencia de otros cuadros, no haya que armar desde cero esa zona.

Diego Ávalo
decano.com

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Comenzó la pretemporada y se renovó la ilusión. Analizaremos línea por línea lo que podría ser el nuevo equipo de Martín Lasarte.

Gustavo Munúa había plantado una idea futbolística en el equipo y el mayor logro suyo fue lograr la credibilidad de los jugadores en su proyecto. Martín Lasarte ya anunció a la prensa que intentará continuar el camino andado, utilizando lo bueno y mejorando lo que no ha sido tan bueno. Basándonos en sus declaraciones intentaremos analizar y proyectar lo que podría ser la figura táctica del nuevo DT y su estrategia futbolística.

Comenzaremos en esta nota por la línea de fondo y el golero. Los equipos de Martín Lasarte y salvo en ocasiones muy excepcionales, juegan con una línea de cuatro defensores y obviamente un golero. Es decir que desde el punto de vista de la figura táctica no habría mayores modificaciones. Tampoco las habrá desde el lado de los nombres. Esteban Conde renovó su vinculación con la institución, Jorge Fucile, Mauricio Victorino, Diego Polenta, y Alfonso Espino, por ahora, continúan también en el club. Habrá que esperar que ocurre con el capitán y el lateral izquierdo, que son quienes tienen chances de emigrar. 

Para esta temporada se busca subsanar una carencia que tuvo el Decano en su plantel la temporada anterior: una alternativa para el lateral derecho. Es por eso que se maneja la posibilidad del arribo de Agustín Sant’anna o Alex Silva en esa posición. Habrá que ver como se encuentra Fucile, jugador de gran experiencia y trayectoria, pero en caso de tener que recurrir a estos dos laterales, se ganará en velocidad y dinámica a la hora de atacar aunque tal vez se perderá efectividad en la marca. Como alternativa para la zona central está Erick Cabaco y para la parte izquierda de la línea final se encuentra Mathías Olivera, juvenil que proviene de las formativas y en quien hay cifradas esperanzas a corto plazo para ocupar esa posición. 

La diferencia que seguramente notaremos al analizar el nuevo Nacional, será la estrategia a utilizar. El equipo de Gustavo intentaba, casi en la totalidad de las veces, salir jugando por abajo desde el fondo. Prácticamente era una obsesión, incluso arriesgando cuando el equipo rival presionaba en esa zona. Los equipos de Lasarte, no tienen esta premisa como prioridad. Si se puede salir jugando, se hará, pero si la cosa está complicada se sale a la manera tradicional intentando saltar líneas de presión y disputando el balón lejos del arco propio. Quien perderá algo de protagonismo a la hora de tener el balón, será seguramente el arquero Esteban Conde quien con Munúa tenía papel principal como salida clara cuando la cosa se complicaba.

Veremos además un equipo que se adapte más a lo que proponga el rival y al contexto del partido. La línea final con Munúa se plantaba, casi sin excepciones, a 10 o 15 metros del área, sin importar la condición de local o visitante, y tampoco el equipo que se tenía enfrente. Con el nuevo entrenador, veremos un equipo que variará de acuerdo a lo que pida el partido y a los momentos de los mismos. Algunas veces la línea de cuatro se refugiará sobre el arco de Esteban Conde para defender y salir de contra; en otras ocasiones se intentará adelantar las líneas. Incluso dentro del mismo partido y de acuerdo a como se vaya presentando, se podrán apreciar los mencionados cambios de estrategia defensiva. 

Hasta acá lo que pensamos puede ser la propuesta en zona defensiva del equipo tricolor para el torneo que se avecina. En la próxima nota intentaremos descifrar el medio campo y el ataque que veremos en cancha a propuesta del flamante técnico tricolor.

Diego Ávalo
decano.com