¿La fórmula del éxito?

Nacional se anima a apostar a técnicos inexperientes salidos desde adentro del club. Funcionó con Gallardo, funcionó con Gutiérrez, ¿funcionará con Munúa?

En la temporada 2010-2011, el equipo tricolor dirigido por Juan Ramón Carrasco fue Campeón Uruguayo, obteniendo el Clausura y la Tabla Anual. Ese plantel tuvo un gran lider que fue Marcelo Gallardo, el diez argentino que decidió al terminar esa temporada que su carrera como futbolista había llegado a su fin, y su carrera como técnico comenzaba allí en el equipo tricolor.

En ese debut de Gallardo como técnico, Nacional ganó el apertura y la Tabla Anual, llegando a las finales contra el ganador del Clausura, Defensor Sporting. El 16 de junio de 2012, Álvaro Recoba puso el 1 a 0 en la final con la que el decano obtuvo el 44° Campeonato Uruguayo, y el bicampeonato. Gallardo terminó así con un 74,4 % de los puntos obtenidos, el tercer mejor porcentaje del 2000 hasta ahora. Con 68 goles, fue el cuarto más goleador en ese mismo período, y el segundo con mejor saldo (+ 37).

Luego llegaron tres técnicos: Gustavo 'Chavo' Díaz, Rodolfo 'Vasco' Arruabarrena y Gerardo Pelusso. Un técnico que venía de perder una final ante Nacional, otro argentino con experiencia como jugador en Europa, y otro de peso como Pelusso que buscaba repetir la campaña que había hecho en el tricolor durante la temporada 2008-2009. 

Díaz obtuvo el 64,7 % de los puntos, hasta que fue cesado por malos resultados. Luego de un interinato de Juan Carlos Blanco, llegó Arruabarrena, quien tenía la experiencia de haber dirigido a Tigre de Argentina. El 'Vasco' obtuvo el 65,3 % de los puntos, siendo así el décimo mejor técnico del 2000 hasta ahora. 

Al terminar el Apertura de la temporada 2013-2014, Arruabarrena renunció, y Pelusso tomó su lugar. En lo internacional, hizo la peor campaña de la historia de Nacional en la Libertadores. En lo local, perdió el Clausura. En ese torneo corto logró el 50 % de los puntos, y fue cesado luego de un nefasto partido clásico donde el rival casi iguala el récord de la máxima goleada, que había logrado el decano en 1941.

Nadie quería tomar el timón del barco en ese momento. Surgió el nombre del director técnico de la Tercera División: Álvaro Gutiérrez. Él venía de ganar un clásico por 4 a 0, y de ser campeón, por lo tanto parecía una buena idea que se encargara del interinato hasta que se encontrara otro técnico “de peso”.

El debut de Gutiérrez se dio nada más y nada menos que en el Tróccoli ante el local, Cerro. Esa tarde ganó el decano con dos goles de Leandro Barcia y uno de Gastón Pereiro, un triunfo con la Cantera Inagotable a toda máquina. Luego llegaron las victorias sobre Miramar Misiones y Fénix, y la consecuente clasificación por 19° ocasión consecutiva a la Copa Libertadores. Estos buenos resultados llevaron a la directiva a confirmar a Gutiérrez en la dirección técnica del primer equipo.

El Apertura de la temporada 2014-2015 fue una maravilla en cuanto a números, el mejor de toda la historia para el Bolso. 93,3 % de los puntos conseguidos, y un clásico tan emocionante como histórico: una remontada íntegramente realizada en los descuentos. En ella son determinantes tres cambios de Gutiérrez: Fernández (participa del gol del empate), Taborda (le hacen la falta del tiro libre de Recoba) y Recoba (hace el gol de la victoria). El Bolso fue campeón del Apertura, y le sacaba diez puntos a Racing, el escolta, y diecisiete a Peñarol, en la Tabla Anual.

Quizás lo único reprochable en la era Gutiérrez es la Libertadores. Nacional perdió 1 a 0 ante Palestino de Chile en Santiago de Chile, y luego ganó por 2 a 1 en el Gran Parque Central. Por el valor extra de los goles de visitante, el conjunto trasandino consiguió el pasaje.

Nacional jugó a media máquina el Clausura, y se mentalizó en la semifinal. Solo necesitaba ganarle un partido al campeón del Clausura, Peñarol, para ser campeón uruguayo por 45° ocasión, ya que también había ganado la Tabla Anual. Ese partido terminó 3 a 2 con goles de Fernández, Alonso y Romero.

Gutiérrez es el segundo mejor técnico en porcentaje de puntos obtenidos (75,8 %) en este milenio, solo por debajo de Juan Ramón Carrasco (78,3 %). Su equipo convirtió 61 goles, el octavo más goleador de la última década, y el quinto menos goleado de la misma.

Recibió 30 goles en la temporada local, de los cuales 28 fueron a Gustavo Munúa. El golero, con experiencia como jugador en España e Italia, será el nuevo director técnico tricolor. Hasta ahora fue cinco veces Campeón Uruguayo con Nacional, una estantería que le da crédito para hacerse cargo del primer equipo.

Se han dado otros casos de futbolistas que terminan su carrera adentro de la cancha, y comienzan otra parados al lado de la línea de cal. Un caso es el de Juan Martín Mujica, campeón de la Copa América 1967 con Uruguay, de la Copa Libertadores 1971, la Intercontinental 1971 con Nacional, y cuatro veces Campeón Uruguayo. En 1979 cuelga los botines luego de una temporada en Defensor, y pasa a dirigir a Nacional. En ese primer año, es Campeón Uruguayo, de América y del mundo.

Hugo De León cerró su carrera en Nacional en 1993, luego de haber ganado dos Libertadores, dos Intercontinentales y dos Uruguayos con el decano. En 1998 es designado a la dirección técnica del club, y gana el Apertura y el Clausura. Luego sería campeón en 2000 y 2001.

Héctor 'El Manco' Castro debutó en Nacional en 1924, donde estuvo hasta 1932, para volver al año siguiente y colgar los botines en 1936. En ese tiempo ganó tres Campeonatos Uruguayos, un Torneo de Honor y un Torneo Competencia. En 1939 inició su carrera como director técnico en Nacional, y obtuvo cinco Campeonatos Uruguayos consecutivos, el primer quinquenio tricolor. En 1952 volvería a Nacional, y ganaría nuevamente el torneo local, convirtiéndose así en el técnico más laureado a nivel local en la historia del club.

Víctor Espárrago jugó en Nacional hasta 1982, donde ganó dos Libertadores, dos Intercontinentales y seis Uruguayos, y en 1983 inició ahí mismo su carrera como director técnico. Ese año obtuvo el Campeonato Uruguayo, y luego continuó su carrera en España.

Son anécdotas, estadísticas, nada más que eso. Pero si hay algo que Munúa tiene en Nacional, es crédito. La mejor de las suertes para él, que, a la larga, también será la de nosotros.

Martín Madruga
decano.com