Por decano
22 Nov 2021
entrevista
Majic

Dialogamos con el candidato por Identidad Nacional sobre los temas de interés electoral.

Daniel Majic decidió ser candidato a las elecciones de diciembre por la presidencia por Identidad Nacional porque cree que “Nacional necesita cambios profundos en algunas de sus áreas, precisa humanizar las relaciones interpersonales, volver a creer en el socio y darle su espacio, volver a ser un club de puertas abiertas”.

En entrevista con Decano, el arquitecto contó el porqué de su candidatura: “Creemos que el socio es mucho más que una cuota y un voto, y en estos últimos encuentros que hemos tenido con grupos de asociados, han confirmado aquella famosa frase que dice: ‘Se acuerdan de nosotros en meses electorales’”, expresó.

Diagnóstico de la situación deportiva actual

Creo que hemos equivocado los caminos. Contratamos mal, trajimos jugadores caros que no han hecho ninguna diferencia. Seguimos creyendo que el ‘fútbol champagne’, como les gusta decir a algunos, es traer jugadores que ya han demostrado su capacidad en el mundo y vienen a sacarse su última foto con la gloriosa camiseta de Nacional. Y nosotros creemos que Nacional, y el propio jugador, merecen más que eso. La institución merece que vengan los mejores en su mejor momento, no que vengan a retirarse los jugadores que en algún momento fueron desnivelantes a nivel internacional.

Para nosotros, Nacional merece un proyecto deportivo serio, que apueste a las formativas, a generar esa cantera que en algún momento tuvimos, que no es ni más ni menos que una fábrica de jugadores. Estamos esperando que vengan los grupos inversores a capitalizarnos, cuando lo que deberíamos estar haciendo es apostando a que nuestro producto, nuestro jugador, sea un jugador completo intelectual y deportivamente. Esto lo hemos visto en la gerencia de Daniel Enríquez, donde en la última presidencia de Alarcón, hubo una venta que se aproximó a los 33.000.000 de dólares en jugadores. A eso queremos volver. Ha pasado el tiempo, hay muchas aplicaciones que se van incorporando a la vida deportiva, estudios, porcentajes de pases, etc. En definitiva, lo que estamos perdiendo es el crear dentro de nuestros jugadores la mística del ‘de dónde venimos’, ‘lo qué sentimos’, y tener bien claro qué queremos.

Hoy hablar de logros internacionales es ganarse el título de loco. Y la verdad, prefiero recibir ese tipo de adjetivo y no quedar esperando que las cosas sucedan sin hacer nada. Es lo que veo que está sucediendo. Por eso tenemos proyectos deportivos sólidos con Enríquez a la cabeza; proyectos deportivos audaces, en los cuales pretendemos incorporar la modalidad de asociación entre plantel y club en función de los motines que hay hoy en la Copa Libertadores.

La Libertadores pasó a tener 30 millones de dólares de premio al ganador. Si vos eso lo dividís con el plantel, y le incorporás un análisis de los partidos que se te pueden generar después de salir de la fase de grupos, llegás a una conclusión que, resumiéndola a groso modo, se podría definir en seis partidos para llegar a la final, que es una. Así que, si estamos hablando de un monto de esa cantidad, seis partidos, difíciles obviamente, pero podés pensar que muchos jugadores vinculados a nuestra institución ven este proyecto, nos ven alineados, que el dinero está y lo tenemos que ir a buscar todos, generamos una convicción que nos va a dar el primer paso para llegar a esos objetivos y volver al podio. Eso creemos, y con Daniel (Enríquez) lo hemos conversado, por eso me animo a seguir planteándolo, porque tenemos el aval de los protagonistas. A ellos tenemos que escucharlos.

A partir de ello, generar una estructura deportiva que vaya financiando al club. ¿Cómo valorás a los jugadores hoy? Con los campeonatos internacionales y la presencia en la selección. Son básicos. Nombres que surgieron en esas conversaciones son jugadores que están jugando en la segunda división de ligas del fútbol europeo, que podrían estar interesados en formar parte de esto, y ahí empezamos a formar figuras con nivel internacional competitivo, que pueden acercarse a marcar la diferencia en los campeonatos internacionales del continente. Los brasileños hoy lo están haciendo. Ya ellos visualizaron que la Copa Libertadores es un retorno económico. Es subir la mira, dejar de mirarnos el ombligo y también dejar de ver quién pinta más árboles de blanco azul y rojo u amarillo y negro para poder subir los objetivos, que creo que hoy no estamos a la altura de nuestra historia. Le estamos fallando a muchas generaciones que no han visto a Nacional salir a una cancha convencido de que podía ganar.

Estamos convencidos de que si al pibe de las formativas hoy le decís que esto es solo por plata y que en Brasil hay tantos millones, en Argentina tantos otros, cuando se enfrentan a esos equipos ya salen 1-0 abajo. Entonces, hay que cambiar eso, volver a la cabeza original. Además, si esto fuera por plata, tendríamos que estar 15 puntos arriba de los cuadros del torneo local.

¿Cuáles serán las primeras medidas deportivas si le toca asumir la presidencia?

Contratar a Daniel Enríquez de manera urgente y Pablo Fuentes como su secretario técnico. Y de ahí en más, generar una estructura seria de formativas, donde podamos recobrar aquel famoso selectivo que era la combinación de jugadores, más allá de su edad, de las distintas divisiones, para interrelacionarlos. Los jugadores de tercera, cuarta y quinta son los que tienen una proyección a ojo de nuestros profesionales a cargo. Ese selectivo lo que genera es que los futbolistas de menor edad empiecen a codearse con los más grandes y empiecen a generar una especie de selección interna del club, de treinta o cuarenta chiquilines, que empiece a jugar, rotar partidos en el interior del país, aprender y hacer creer que es un proyecto de club integrado, horizontal, y que todos pueden llegar a dar una mano, que se consolide a nuestra misión de club. Que es el club de todos.

Lo que para nosotros es importante es volver a incorporar a la vida interna a los campeones del mundo. Todavía no conocí a un jugador campeón del mundo que sienta que Nacional le es un buen anfitrión. En general, todos tienen algún reparo por la forma en que fueron tratados históricamente. Ese es el primer reconocimiento que deberíamos hacerles. Y que estos chiquilines -juveniles- se integren a las conversaciones, a conocer nuestra historia y que vean que es posible y no es un invento que solo vemos en equipos europeos. Generar una convicción de que podemos llegar al objetivo posible, porque es el primer paso. Si no, seguimos en esto de que ‘vamos a esperar que venga el sueldo, el que nos invierta, etc’. Acá estamos generando una situación real, el club tiene sus recursos propios en los jugadores, y ahí es adonde tenemos que aportar, a formarlos, a que pasen más de dos horas en las concentraciones, que pasen seis, ocho horas, que convivan, y que lo hagan con los campeones del mundo y escuchen la historia de Nacional.

Para la llegada de un jugador al plantel principal, ¿cuáles son los pasos que debe cumplir? ¿Quién los propondrá? ¿Quién decidirá? ¿Quién negociará?

Daniel Enríquez es el director deportivo. Esto es un intercambio. Van a haber pros y contras en cada opción. Yo apuesto a que sean los directores técnicos del área específica que den el aval definitivo a todo tipo de incorporación.

El que va a negociar los contratos va a ser el gerente del club, que va a traer la propuesta económica, va a ser discutida en la interna de la directiva. Va a haber una Comisión de Contrataciones, como había planteado Alarcón. Por ahí va la cosa, pero teniendo bien claro que no vamos a ir a regatear un número por hacerlo, ni decirle al jugador lo que tiene que ganar. Le vamos a poner delante de él la posibilidad de ser una gloria del club, de volver a crecer y estar dentro de un club que apuesta a algo más que un objetivo de entre casa. Apostamos a generar un valor agregado al formar parte del plantel de Nacional, y ese valor es todo este contexto que hay que generar, en donde todos tenemos que estar alineados con el objetivo: volver al podio internacional.

Formativas: ¿Cuál es la realidad? ¿Cambios a proponer?

Generar jugadores de calidad en formativas. Que tengan el conocimiento de lo que es hacer un cambio de frente, hacer un pase. Que tengan la base de lo que es jugar al fútbol. Hay jugadores que llegan rápido a primera y no tienen todos los fundamentos, entonces empiezan a mostrar debilidades y quedan expuestos frente al público. Después terminan siendo los responsables del caos que los propios directivos generan.

Para mí es esencial el selectivo que va generando el intercambio de jugadores. Incluso lográs que en el interior aparezca la camiseta de Nacional integrándose fuera de Montevideo. Generar intercambio con clubes internacionales también.

¿Cuál es la actualidad del Gran Parque Central y que se hará con él?

Es un tema que nos ha desvelado muchas veces, con alegrías y cicatrices.

Luego que Alarcón dejó su presidencia, traté de poner mi opinión arriba de la mesa a todos los directivos, dejarla clara. Ricardo dejó el club y la nueva administración eligió otro camino para el Parque. No quise hacerlo público ni hablar a los cuatro vientos de esto, lo hice en la directiva y asambleas, donde creí que era lo correcto.

De todas maneras, creo que al socio no le llegó lo que planteaba, que era seguir sin definir un gran escenario monumental sin tener financiación. Pretendíamos que cuando proponías un palco, este financiara obras en todo el estadio, que en definitiva fue lo que no pasó. Los palcos terminaron saliendo más caros de lo que la gente pagó, y el club terminó endeudándose para poder cumplir con el socio que lo compró. Lo que duele es que hayan seguido con el proceso, sabiendo que después el que venía se tendría que arreglar como pudiera.

Esta directiva hizo lo que pudo en ese sentido.

Es necesario dar por cerrado el tema en el sentido de que todas las tribunas tienen que brindar sus servicios. La infraestructura del Parque tiene que estar funcionando, no puede ser que no haya agua en los vestuarios, y que la gente que va a las cabeceras tenga que ir a los baños químicos hace cinco años.

Si estamos hablando de una gestión saludable es inconcebible que esto pase. Tenemos que tener un Parque en el que uno camine por sus alrededores y no encuentre escombros, ticholos, cables por todas partes. Ese sería un compromiso inmediato.

Después, lo que creemos que debe pasar en el GPC a futuro es generar una comisión integrada por palquistas, butaquistas, gente de cada tribuna, en donde se debatan las opciones y debilidades que cada uno está viendo de su situación en cada uno de los sectores. A partir de eso, empezar a generar prioridades y buscar la forma de reconstruir un estadio para que todos estemos cómodos y no corramos los riesgos que hoy corremos.

¿Cuáles serán los próximos pasos en Los Céspedes?

Creo que es el lugar en donde debemos apostar; la fábrica donde debemos levantar. Es el lugar donde debemos incluir al socio para que vaya a disfrutarlo. Es donde hay que invertir. En infraestructura, incluso hasta en hospedaje, generar espacios de recreación, donde el socio se sienta vinculado al plantel de alguna manera. Que Los Céspedes sea una ciudad. Que por donde vos camines, veas lo que es ese lugar.

Tenemos lindo proyecto para el socio en Los Céspedes, que se titula “Amanecer en Los Céspedes”.

¿Planes para el club social?

Como hace quince años que estamos con el tema del Parque y justo estábamos por, de alguna manera, cerrarlo, pusimos un nuevo tema arriba de la mesa, que es el Club Social. Entonces, aparecimos con un gimnasio, donde estaba la Sala Restuccia, con la calle 8 de Octubre vinculada a socios ‘anexos’ y nos olvidamos de todo lo que significa para algunos ese magnífico edificio de arquitectura.

Lo que a mí me duele mucho es que los que tuvieron la oportunidad de analizar el proyecto, visualizaron al edificio como simples losas de hormigón y nunca lo entendieron en su real contenido. Digo esto porque lo que se hizo fue desmantelar lo que pasaba dentro de la sede, porque es tan noble ese edificio, que ya resistió la reutilización del espacio que se le asignó. Se sacó parte de nuestra identidad de ese lugar.

Creo que es viable un club social. Una de las maneras que tienen de crecer los grandes pueblos y sociedades es respetando a la historia y a las minorías.

La palabra es equilibrar. Podíamos perfectamente ser un Club Social y a su vez dejar hacia 8 de Octubre la Sala Restuccia, el ingreso a la sede y los íconos que nos han identificado, y tenemos lugar para hacerlo y para hacer un club y hacer deporte. Tampoco es una novedad.

Habría que ver qué aporte real le está dando -el Club Social- a Nacional hoy, porque tampoco la tiene muy clara el socio.

¿Cómo encarará el trabajo dentro de AUF y sus distintos organismos?

Cuando iniciamos este movimiento que hoy vemos crecer con entusiasmo y una opción válida, una de las primeras reuniones fue con Eduardo Ache, para conocer su opinión y cómo veía las elecciones. En esa reunión nos enteramos de cosas que nos dolieron mucho, porque el respetar a nuestros referentes, más allá de nuestras diferencias, es la clave de que te puedas abrazar con alguien cuando lo encontrás en las buenas y cuando lo encontrás en las malas.

Sentí un cuestionamiento de su presencia en la AUF por parte del oficialismo, y creo que lo mínimo que podemos decir de eso es que es una falta de respeto a una persona que está totalmente identificada con el club y con la defensa de la institución en todos los aspectos.

Más allá de las diferencias de interpretaciones que tenemos con Eduardo, nos llevamos muy bien y creo que es la persona indicada para que siga al frente de la parte de la AUF, y combinar con él las personas que lo van a acompañar. Es el que sabe lo que está pasando. Podremos darle nuestra interpretación de determinados hechos, pero va a ser totalmente consensuado.

Comunicación y marketing: ¿cuál es el diagnóstico y los objetivos futuros?

Creo que la comunicación del club debe mejorar. En el sentido en que la gente no puede sentirse tan alejada, y ahí va nuestro proyecto de humanizar todo este tipo de aspectos.

Lamentablemente no tenemos una sede social donde recibir a nuestros socios hoy, y esa es una de las cosas que nos duele. Supongo que hacia el interior de la república, este alejamiento del espacio lo deben estar sintiendo hace muchos años, pero ahora en Montevideo lo vamos a empezar a sentir nosotros, porque nos quedamos sin el lugar donde referirnos como sede.

Entonces, debemos revisar un poco cómo debemos acomodar esto. Sin ser autoritarios ni prepotentes, simplemente intercambiando opiniones.

La comunicación debe mejorar muchísimo en ese sentido. Creemos mucho en la comunicación directa de lo que está pasando en la Comisión Directiva. Es necesario que el socio pueda ver online, a través de un canal de YouTube, todo lo que se discute en directiva, porque no la queremos hacer a puertas cerradas. Cuando no se toquen temas que refieran a personas, ingresos, manteniendo la reserva de la privacidad; todos los temas tienen que ser abiertos y estar filmados. Las sesiones del parlamento son transmitidas en directo, ¿por qué al socio del exterior no le puede llegar lo que está pasando dentro de la directiva? Eso me parece básico; informar al socio para que pueda opinar y proponer. Es la manera de enriquecernos.

Los directivos no son seres iluminados. Lo fundamental de un presidente es rodearse de los mejores en los lugares correctos, y ese es el secreto de esto. No ser el protagonista de nada, ser el que ordena una situación interna en base a un proyecto.

La otra de las ideas es generar el voto consulta. Que el socio sepa el orden del día y tenga la posibilidad de opinar, con un pin personal. Que después sepa qué votó cada directivo, que las actas se publiquen en los cónsules y las tengan a mano.

Entonces se empieza a transparentar, a saber qué es lo que pasa y generás confianza, que es lo que tenemos que lograr.

Después de eso, creemos mucho en la participación de los cónsules, democráticamente con cónsules de Montevideo, que empiecen a relacionarse con los del exterior, formando una red de apoyo o control, de dinamizar propuestas, y que la directiva tenga un plazo para votar por sí o por no ante las propuestas que le vayan llegando.

Creemos que la directiva puede comunicar a través de su presencia en distintas localidades, que cada jugador de Nacional tiene que ser un embajador de la Cultura Nacional, los valores del club.

A nivel comunicacional, pensamos que tenemos que ser lo más democráticos, abiertos, plurales, inclusivos, y no dejar a nadie afuera. Hoy en día, Nacional hace una diferencia al tener una tarjeta de crédito o débito, y creo que debemos entender que somos el club más popular y que el tejido social está en todos lados de nuestra sociedad. Que el amor al club es el ancla de mucha gente para sentirse parte de esta sociedad. Esa parte la tenemos que cuidar con la máxima atención y responsabilidad.

Y en marketing hay tantas cosas para hacer en el club. Hoy en día ves que hay derechos reservados por el uso de determinadas imágenes del club, y realmente no sabés si el club recibió el retorno a la altura de lo que esas

imágenes le generaron a sus productores. Ese tipo de cosas hay que empezar a mirarlas con cuidado, porque después un hincha quiere usar determinada filmación o foto de nuestra institución y prácticamente es censurado. Muchas veces somos demasiado generosos con los poderosos y demasiado estrictos con los humildes. Es un tema a equilibrar y revisar.

¿Cuál es el futuro del básquetbol?

Lo que nosotros pretendemos en el interior es poner a una figura referente vinculada al club, y encontramos en el ‘Tola’ Luzardo una figura que está comprometida con la unidad del club en el interior, dolido por lo que pasa en el interior, y dispuesto a bancarse alguna que otra pedrada que le puede llegar desde otro lado en función del compromiso solo con el Club Nacional de Football, y eso a nosotros nos llenó de alegría y transmitió un apoyo importante. En el básquetbol pasa algo igual: hablamos con Diego Losada, que es un basquetbolista vinculado al club, trabajó muchos años en Cordón, como para generar una figura que sea el nexo entre el básquetbol y la directiva, y que empecemos a tratar de ordenar un poco la casa por ese lado. Ojalá un día todos los que se sienten más importantes que Nacional entiendan que esto no es un tema personal, sino institucional.

¿Qué sigue con el femenino? ¿Cuál será su futuro?

Respecto al fútbol femenino, creo que hay un gran sacrificio de la gente que está detrás de él para llevar adelante esta propuesta y estos logros que han tenido, y que hay que respaldarlo, así como todas las actividades deportivas del club. El atletismo y el ciclismo en algún momento también llegaron a ser marcas importantes del club.

Todo lo que tenga la camiseta de Nacional tiene que tener el apoyo de la directiva, y para eso queremos generar la figura de un coordinador general de todos estos deportes, que institucionalice las relaciones, que no sean un tema de voluntades, que haya mecanismos institucionales para que las cosas lleguen a la directiva, que no dependa de la voluntad del momento. Queremos que esto pase a ser un club realmente integrado, que es lo que necesitamos para volver a la humildad y autocrítica que necesitamos, y retornar a ser los grandes de América que siempre fuimos y que no deberíamos nunca de haber dejado de estar en ese podio.

¿Cómo se imagina a Nacional en el año 2030?

Me lo imagino campeón de la década, como lo viene haciendo en estas últimas dos décadas, y compitiendo en una liga sudamericana fuerte, con los clubes más populares de cada uno de los países que tengan títulos en su historial.

Me lo imagino, también, como protagonista de giras a nivel europeo, donde nuestros planteles y jugadores formen parte de intercambios internacionales con equipos de primer orden.

Lo veo volviendo a ser parte del primer fútbol del mundo y compitiendo en el alto nivel. Realmente, así me lo imagino. Y a partir de eso, van a llegar ofertas, intercambios, y nuestros socios van a multiplicarse. Vamos a generar un Nacional que además de nuestro Parque Central, sea local en otras ciudades del país y la región.

Me lo imagino por ahí, un club con una apuesta seria, al futuro y a los grandes objetivos.

Mensaje al hincha

Le pido que nos vote. Que confíe que hay un antes y un después si realmente apuesta a esto.

Decirle que va a sentir el cambio, sentirse parte del club, tenerlo de puertas abiertas, va a ser escuchado y también estar informado de todo lo que pase. Estará en su absoluto derecho a plantear.

Vamos a armar una estructura para que todos y cada uno de nosotros vayan a la cancha felices.

Y que cada uno vuelva a sentir el orgullo de ser de Nacional; motivarnos siendo de Nacional.

Hoy en día hay poca motivación en el hincha de escuchar a los directivos, también es poca la motivación de ir a votar, pero les pido ese esfuerzo y que apoyen a esta corriente que estamos generando que es la que a Nacional hoy le va a hacer mucho bien, y que en breve se va a notar la diferencia y cambios para tenerlos de vuelta en el podio del que nunca debimos habernos olvidado. El de nuestros héroes, de Los Céspedes, de Atilio Narancio, el abuelo de nuestro vicepresidente que hipotecó su casa para que Nacional saliera campeón, de los Restuccia, de los Iocco, de los que se jugaron y se embarraron por el club, que hoy nos están viendo, y justo esta fecha es una fecha solemne que debemos honrar.





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